Neymar estuvo a punto de llegar a los golpes con sus compañero Nélson Semedo durante el último entrenamiento del FC Barcelona en Estados Unidos. El futbolista reprendió a su compañero por una fuerte entrada y tuvo que ser agarrado por Busquets para que sus recriminaciones no terminaran en un intercambio de golpes, según El País.
Semedo es el último fichaje del conjunto azulgrana en el mercado de verano, mientras Neymar se encuentra en el centro de la diana informativa azulgrana por su posible marcha al PSG y su silencio a la hora de afrontar la situación.
El brasileño, según las imágenes que publica el Daily Mail, abandonó el entrenamiento tras quitarse el peto que portaba y lanzarlo al suelo, golpear un balón y lanzar otra patada al aire, ante la mirada del técnico Ernesto Valverde y del resto de sus compañeros.
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