El efecto dominó de hacer bien las cosas

Las sociedades debaten, unas con más profundidad que otras, sobre los beneficios del crecimiento económico con base en el uso racional de los recursos no perennes, es decir la sostenibilidad en el tiempo. Por ello intentan, afanosamente, alcanzar un equilibrio estable a largo plazo. Éste dependerá del grado de la gestión pública, el desarrollo de los negocios, el patrón de consumo de la sociedad y la honestidad de los empresarios, todos en búsqueda de la rentabilidad esperada, social y financiera.

Ecuador, luego de casi una década y media perdida, hace lo que puede para crear un entorno favorable para las ideas, la innovación, la eficiencia en los negocios, y el bienestar de la sociedad. Por ello busca, ya casi desesperadamente, implementar las estrategias y políticas públicas más acordes con la realidad que se evidencia día a día.

A ésta realidad me quiero referir y plantear una hipótesis para explicar lo difícil del camino a seguir, fundamentado en un concepto matemático y algunos datos que hacen parte del argumento. La hipótesis es que la inseguridad desalienta la inversión productiva y afecta el desarrollo de negocios. Cuando me refiero a inversión productiva es aquella que agrega valor a bienes e insumos y genera empleo, bienes y servicios, rentas, impuestos y progreso. Como negocios comprendo la actividad leal que emprenden personas y sociedades jurídicas para complementar a la inversión productiva y financiera y lograr ganancias por eficiencia y eficacia respetando la ley, al gobierno y a la sociedad.

Para los que adoran los números, no es otra cosa que una ecuación. El desarrollo de negocios depende de dos constantes y dos variables. Educación (EDU) y Gestión Pública (GPUB) son las constantes. Inseguridad (INSE) y Corrupción (CORRUP) son las variables con sus determinantes α y β respectivamente.

DN = F [(EDU + GPUB) – (α INSE*β CORRUP)]

Desarrollo de Negocios (DN) es una función de 4 factores: 2 constantes y 2 variables. Los factores EDU y GPUB se consideran constantes porque suponemos que no van a disminuir o declinar en su aporte al crecimiento global de la sociedad, se necesitará más educación y más gestión pública eficiente para crecer y lograr el bienestar de la sociedad. A pesar de la pandemia, el sector de la educación tiene franca mejoría en lo institucional, programación académica, facilidades físicas y tecnológicas y programas de capacitación para docentes. Por el lado de la gestión pública, se aprecia claramente la intencionalidad de lograr un equilibrio entre el gasto, los compromisos internos pendientes, la deuda externa, la inversión y la política social.  Los números alcanzados por la actual administración lo demuestran: niveles más altos de Reservas Internacionales, reducción fuerte del déficit fiscal, compromisos de pago cumplidos, renegociación de tramos de deuda y su cumplimiento oportuno, aunque poca inversión pública la indispensable, sin afectar la política social de salud (vacunación).

Los factores variables, INSE y CORRUP están correlacionados y la corrupción es la piedra angular de la inseguridad. La falta de control de éstas por parte de la autoridad, genera efectos contraproducentes en términos de desarrollo de negocios. La prevalencia no crea condiciones estables y positivas para invertir o para atraer inversión extranjera directa. Es tiempo de inversión privada y menos de la pública.

Regresando a nuestra ecuación, con estas evidencias se confirma la relación matemática de que la inseguridad y la corrupción van de la mano. El factor α INSE*β CORRUP será menor si existe acuerdo (paz mafiosa) y por ello las políticas públicas para el desarrollo de los negocios pueden funcionar mentirosamente. En caso de que no exista acuerdo, como desde 2018, la inseguridad será mayor y el efecto sobre el desarrollo de negocios será negativo. La ecuación nos demuestra que las estrategias o políticas públicas de la actual Administración de Gobierno, a través de la educación y la gestión pública serán contrarrestadas por la inseguridad y el efecto en el desarrollo de los negocios para el crecimiento sostenible, podría ser nulo. Parecería que es necesario un cambio radical en seguridad, para sin acuerdo mafioso, fomentar el desarrollo de los negocios.

Otra forma de visualizar cómo la inseguridad afecta a los negocios, es analizar el comportamiento de las organizaciones empresariales respecto de su funcionamiento: horarios, gastos en seguros, logística de transporte y entregas de insumos. Dada la inseguridad, los negocios que temen por asaltos o que asalten a sus clientes prefieren cerrar temprano, aunque somos testigos por las noticias que hoy asaltan en pleno día.

Durante mis años de estudiante en Michigan State University en EastLansing Michigan, solía realizar el mercado a las 3 o 4 de la mañana porque los precios eran muy cómodos para los estudiantes. Las cadenas de supermercados atendían las 24 horas del día. Durante los 3 años que viví allí no conocí de un asalto a supermercado o cliente, es decir alta seguridad ciudadana. En Quito son muy pocos los negocios que funcionan pasadas las 22:00, por inseguridad.

Sin embargo, las decisiones que adopte el Gobierno, con ayuda externa, facilitan la indispensable depuración de las instituciones públicas y reducir el accionar corrupto de funcionarios públicos y malos empresarios, presionando para una paz mafiosa como la vivida que mentirosamente creo un entorno adecuado para los negocios

No es una tarea fácil es muy complejo, pero es muy necesario para su gobernabilidad y para el futuro de Ecuador. El camino a seguir, tiene muchos vericuetos y trampas, pero debemos actuar juntos, somos un país de gente honesta, trabajadora y feliz. Esto puede generar un efecto dominó positivo en lo social, económico, político y empresarial.