Paola Roldán, quien logró el hito de impulsar la despenalización de la eutanasia en Ecuador, falleció este lunes, según confirmaron allegados.
La Corte Constitucional (CC) dio paso a una demanda que presentó a través de sus abogados pues pidió declarar la inconstitucionalidad condicionada del artículo 144 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), que se refiere al homicidio simple y se sanciona con prisión de entre diez y trece años.
Padecía esclerosis lateral amiotrófica (ELA), un mal neuromotor que degenera paulatinamente los músculos del cuerpo de las personas e impide controlar el movimiento de las extremidades y puso en debate la despenalización de la eutanasia. Vivía conectada a un respirador.
Alrededor de 340 pacientes de ELA habrían en Ecuador, según estimaciones que ella manejaba.
Una de sus últimas actividades fue llevar a cabo un proyecto que con ayuda de la ciudadanía buscaba sacarlos a la luz y darles un acompañamiento digno.
Indicó que había “escarbado” en el Ministerio de Salud y fundaciones pero no tenía más de 20 personas constatadas.
A inicios de febrero, logró que la Corte Constitucional (CC) aceptara su demanda, con la que se allanó el camino a la eutanasia.
¿Por qué no hay sistemas para diagnosticarnos? ¿por qué nos esconden? ¿por qué estamos destinados a vivir en el abandono?, se preguntó en días pasados, en redes sociales.
“Si tienes ELA o un pariente, amigo o conocido tiene ELA por favor contáctame por interno con el nombre, ciudad y número de teléfono. Si eres médico que trata a la gente con ELA por favor contáctanos por interno. Todo esto será manejado de manera confidencial”, sostuvo.
Para Roldán era hora de que las personas con enfermedades raras y catastróficas sean tratadas con la humanidad que se merecen.
Texto original de El Universo
¿Ya conoces nuestro canal de YouTube? ¡Suscríbete!
La IA marca una nueva era en los procesos editoriales
Unos suben en ascensor panorámico veloz y otros en escaleras espinosas lentas
Mente positiva
ENTREVISTA: Energía sostenible: el futuro empieza en casa
¡Sí se puede!, otra vez levanta el ánimo del Ecuador