Entre los años 2014 y 2016, se registraron unos hechos extraños en un inmueble ubicado en la Cdla. Ferroviaria, cerca del redondel de Guayaquil, Ecuador. El usuario de Twitter @diegoruizmira hizo pública la aterradora historia, en la que él y otros tres compañeros compartieron el departamento durante su época universitaria.
A pesar de que Diego intentó encontrar una explicación lógica a lo que sucedía en la casa, aseguró que había cosas que no podía explicar. El inmueble, conocido como la casa de Amityville, tenía un ambiente pesado que se notaba desde el primer momento en que llegaron, pero como el alquiler era barato y era su primer departamento en la ciudad, no prestaron demasiada atención.
En ocasiones, alguno de los compañeros debía quedarse solo en el departamento por uno o dos días, y en cada ocasión, les pasaron cosas diferentes. Según la versión del internauta, el edificio habría sido construido durante los años 80 o 90.
¿Cuándo empezaron los sucesos paranormales?
“Para mis amigos ocurrieron desde el primer día que se alquiló del depar. Comenzó con cosas pequeñas, como luces encendidas sin explicación o puertas que se abrían solas”, aseguró en el hilo Diego.
Cuando alguien llegaba de viaje y tenia que pasar solo en el departamento, había luces encendidas, sobre todo en las habitaciones o la cocina. Era muy extraño. No podía tratarse de una coincidencia, ya que les sucedía con frecuencia.
“Digamos que lo de las luces podrían ser coincidencias, a lo mejor las dejábamos prendidas y se nos olvidaba. Pero pasaba siempre. Sin embargo lo podíamos atribuir a lo mejor al estado precario del edificio, redes eléctricas sin mantenimiento, etc.”, explica el usuario.
Tiempo después, los universitarios empezaron a sentir sensaciones como si alguien se les estuviera acostando en las camas junto a ellos, también parálisis del sueño de manera seguida. Todo empezó a tornase más fuerte.
Incluso, el papá de uno de los jóvenes les regaló un galón con agua bendita. Sin embargo, eso en lugar de ayudar, hizo enojar a las energías atrapadas en el inmueble.
Luego, los fantasmas dejaron de esperar que se fuera los habitantes para encender las luces de manera espontánea, empezó a suceder con ellos presentes.
“Comenzaban a silbarnos en el oido, a mover las sillas y las mesas del comedor. Se oían pasos, a veces había olores raros. Todo esto pasaba de noche o madrugada. Casi siempre cuando alguno estaba solo. Y se intensificó la sensación de tener alguien junto a ti, mientras dormías”.
Testimonio de usuario de Twitter
Asimismo, cuenta que comenzaron a abrir puertas, trancarlas, tocarlas y cerrarlsas. Cuando no tenían un tema con las luces, era con las puertas.
Como todo departamento universitario, nunca faltaban las reuniones sociales no se manifestaban, siempre esperaban que estén solos.
Uno de los eventos más fuertes fue cuando alrededor de las tres de la mañana, la novia de uno de los universitarios, despertó asustada a su hermano. Él estaba en un estado de parálisis total en la cama, con los ojos bien abiertos y sin reaccionar.
La noche antes de irse, los inquilinos regaron el galón de agua bendita por toda la casa y fue como si se hubieran alborotado con más fuerza.
“Ese depar está maldito. Hasta el más ateo se hizo creyente y casi nunca hablamos de eso, porque de solo recordarlo nos da escalofríos”, finalizó la historia del usuario.
Historia de Roberto Cadena
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