Los textos para la distribución a los alumnos de la educación pública en el próximo ciclo Costa fueron seleccionados, por el Ministerio de Educación, sin analizar su contenido, sin evaluarlos y sin establecer cuáles son los mejores, así lo indica hoy la Corporación Editora Nacional (CEN) en un comunicado de prensa.
Simón Espinosa, escritor y periodista, quien es presidente de la CEN, junto con Luis Mora, director ejecutivo de esa editora, señalan que el ministerio convocó, con plazos y tiempos extremadamente cortos, a una licitación para dotarse de textos, pero no usó el principal criterio, la calidad, como eje del mejoramiento de la educación nacional.
Los directivos agregaron que fue un proceso precipitado que no consideró la calidad y tomó en cuenta criterios ajenos a la acción educativa, como requerimientos burocráticos, el precio más bajo y requisitos sobre MYPES y EPS. Ninguno de los criterios atendió al nivel de los textos o a la experiencia de su aplicación en el aula.
En una carta con fecha 28 de noviembre de 2019, dirigida al presidente Lenin Moreno, la CEN indica que el ministerio arguye que, para participar en la licitación los textos debían ya estar calificados por esa cartera de estado. Sin embargo, la editora aclara que esa calificación se realizó en 2016, es decir hace más de tres años, no para escoger los mejores, sino para determinar si cumplían requisitos básicos para ser autorizados y usarlos en el sector educativo. De ese modo, se igualó a todos por los estándares más bajos, es decir, los mínimos, dando el mismo valor y renunciando a elegir la calidad.
Los directivos de la Corporación Editora Nacional señalan que ya son nueve años que el ministerio no ha realizado una evaluación integral de los textos que ha adquirido. “No se ha intentado siquiera saber cómo se reciben y se usan los textos, desechando la experiencia acumulada y la opinión de los maestros y más actores de la acción educativa. Se prefirió, una vez más, partir desde cero”.
Agregan, que los textos evaluados hace tres años debían ser actualizados; por el avance del conocimiento y porque el ministerio introdujo cambios en el plan de estudios. Además, los ajustes de contenido son necesarios, sobre todo en Estudios Sociales, porque en los años anteriores, hubo un clamor público, expresado en la consulta popular, por la necesidad de institucionalización del país y de combatir la corrupción. Los textos de Estudios Sociales deben reflejar esas grandes necesidades nacionales.
“El ministerio no optó por la calidad y la pertinencia. Seleccionó los textos sin ver siquiera su contenido, favoreciendo a los que parecían más baratos”, asevera la CEN.
Los directivos de la Corporación Editora Nacional solicitan al presidente Moreno, disponer que la selección de textos se haga tomando en cuenta su contenido, nivel académico y pertinencia educativa; que no pesen criterios secundarios o de precio, sino la calidad. Asimismo, proponen que el gobierno fije el monto que pagará a las editoras por el derecho de publicar los textos. Previa evaluación de contenido, que mida su calidad pedagógica y la experiencia de los ya probados, para así establecer cuáles son los mejores y seleccionarlos. No se trata de solicitar más dinero, sino calidad, que es lo que le interesa a la educación.
La Corporación Editora Nacional, tiene más de 40 años de trabajo en el país, con más de 1.000 publicaciones, entre ellas: la Biblioteca Básica del Pensamiento Ecuatoriano, la Serie Ciencias Sociales, la Nueva Historia del Ecuador, la Historia de las Literaturas del Ecuador, la Biblioteca de Historia, la Serie Textos Educativos y otros.
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