Ecuador no es parte de la Alianza del Pacífico por voluntad política del actual gobierno. Para ser parte de la Alianza del Pacífico, Ecuador debe firmar un acuerdo que permita desgravar los aranceles; pero al ver caso por caso la relación comercial con cada uno de los países que integran la Alianza del Pacífico se observa: con Perú y Colombia, el país ya tiene todo liberalizado porque tanto Ecuador, como Perú y Colombia son parte de la Comunidad Andina. Con Chile existe el acuerdo de complementación económica número 65, en el marco de la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi), que establece también una zona de libre comercio y con México se tiene el Acuerdo de Patrimonio Histórico número 29, que si bien es cierto que es limitado, se lo puede profundizar.
Eso quiere decir que las relaciones comerciales ya existen en el marco de acuerdos puntuales entre Colombia Ecuador, Perú, Chile y México (naciones que conforman la Alianza del Pacífico); lo que necesita el país es la voluntad y decisión política para integrarse a este bloque y profundizar la relación con México. No implica un trabajo fuerte para el país, sino únicamente la decisión y voluntad política, pero lastimosamente por un sesgo ideológico no se puede avanzar hacia la integración y aprovechar todas las ventajas de este bloque.
La Alianza del Pacífico le permitiría a Ecuador fomentar los niveles de acumulación de materia prima, bienes intermedios para producir productos y ganar el origen. Es decir, siendo parte de la Alianza del Pacífico se puede exportar a los países que la integran y desarrollar un esquema preferencial recíproco.
La Alianza del Pacífico por un lado busca una mayor apertura comercial, más libre comercio, más desmonte de barreras arancelarias y constituir una plataforma de comercio que permita llegar a más países de la zona Asia Pacífico. Es una mirada hacia el Asia Pacífico a través de la acumulación que se puede generar entre estos países para potenciar las exportaciones.
Si Ecuador no integra la Alianza del Pacífico pierde, porque es una oportunidad para exportar más productos a México; es una oportunidad para acumular más bienes sin ningún costo arancelario entre las naciones que conforman este bloque económico; es una oportunidad para el sector exportador de aprovechar toda esta nueva plataforma y así llegar a más países del Asia Pacífico y es una oportunidad también por todos los recursos e inversiones que el Ecuador podría captar en esta alianza de empresas multinacionales que ven al Ecuador -por sus condiciones naturales- como un espacio propicio para montar industrias.
La Alianza del Pacífico es factible en Ecuador, ya tenemos firmado el Acuerdo Comercial de Cartagena con Perú y Colombia; con Chile tenemos el Acuerdo 65; es decir, si el país entra mañana a la Alianza del Pacífico no hay que hacer nada. En base a lo negociado se pueden aplicar los compromisos de desgravación arancelaria. Lo único que se tiene que trabajar es con México, aunque sí existe la voluntad política y con el apoyo de Chile, de Colombia y de Perú se podría acceder a una mesa de negociación para eliminar los aranceles en aquellos ítems o productos que aún no gozan de ese trato preferencial.
Reitero. Entrar a la Alianza del Pacífico es fácil: se requiere voluntad y decisión política. Ya hemos recorrido un camino con los acuerdos comerciales que ya están firmados, lo único que toca es profundizar la relación comercial con México, reformando el Acuerdo de Patrimonio Histórico número 29 o un acuerdo de complementación económica mucho más profundo y que se amplíe el universo de preferencias de los productos.
Hoy necesitamos exportar más porque este modelo actual de Ecuador está necesitando divisas y el gobierno piensa que la única forma de mantener las divisas es cerrando la economía o evitando la fuga de divisas; cuando lo que se tiene que hacer es trabajar y desarrollar una política desde lo comercial, que nos inserte en nuevos mercados, fomente la oferta exportable, atraiga industrias e inversión y fomente entre el ciudadano la necesidad de emprender.
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