Tras el fracaso del voto telemático en el exterior, que el Consejo Nacional Electoral (CNE) ensayó en la primera vuelta de las elecciones del 20 de agosto de 2023, los migrantes volverán a las urnas físicas para la segunda vuelta del 15 de octubre.
La autoridad electoral declaró nulas las elecciones legislativas en las tres circunscripciones del extranjero. Por lo que a la par del balotaje entre Daniel Noboa y Luisa González, los ecuatorianos en el exterior deberán repetir la elección para seis escaños.
El CNE canceló el contrato vigente por el voto telemático. Este convenio se suscribió con Antroproyectos por USD 756.416 más IVA, por el servicio de soporte, acompañamiento y gestión para la participación de los ecuatorianos en el voto telemático.
Ahora, la entidad empezó un nuevo proceso contractual para regresar al tradicional sistema del voto presencial. El 7 de septiembre de 2023, el organismo firmó un contrato con la empresa DHL por USD 384.496.
Esta empresa se encargará del envío y retorno de documentos, equipos y paquetes electorales, más las urnas y biombos, a las 65 oficinas consulares del Ecuador en el exterior. Desde estos sitios, además, se trasladará el material electoral hacia las 101 zonas en las que los migrantes votarán.
Tres países conflictivos
Además del contrato de transporte, el CNE y la Cancillería anunciaron el alquiler de 59 locales en el exterior para que los más de 450.000 migrantes habilitados voten. Esos contratos no se pueden conocer, ya que se hacen en el extranjero.
Sin embargo, las autoridades adelantaron que habría problemas para la realización de elecciones en tres países: Rusia, Venezuela y Nicaragua. El primero vive una guerra contra Ucrania, mientras que con los otros dos están suspendidas las relaciones diplomáticas.
Pero, según el padrón electoral y los datos de la elección presidencial de 2021. El peso de estos países en esta elección es mínimo. En 2021, los votantes de estos países representaron el 0,08% del padrón total. Y para 2023 esa cifra es del 0,07%.
Además, en la elección pasada no hubo una participación activa de los migrantes en esos países.
En Venezuela, por ejemplo, estuvieron habilitados 10.993 ecuatorianos, pero solo asistieron a sufragar 3.114. Es decir, hubo un ausentismo del 71%. Ese porcentaje se repitió en Rusia.
Mientras que en Nicaragua, hubo 93 votantes habilitados. Pero, según el reporte de resultados finales, no hubo ni sufragantes ni ausentes en esa delegación.
Un voto con un alto ausentismo
Históricamente, el voto en el exterior se ha caracterizado por un alto ausentismo. En 2021, cuando Guillermo Lasso fue electo presidente, solo 139.308 de los 409.290 habilitados acudieron a las urnas. Es decir, hubo un ausentismo del 66%.
Esto se debe en gran parte a que el voto no es obligatorio para los ecuatorianos que estén viviendo en otros países.
Votación de ecuatorianos empadronados en el extranjero
Con base en esos datos, el CNE estableció que el porcentaje de ausentismo en el exterior estaba aumentando.
La respuesta del CNE fue el programa de voto telemático, con el que se esperaba una reducción significativa del ausentismo. Sin embargo, tras al fracaso, se volvió a la fórmula tradicional.
Con información de Primicias
¿Ya conoces nuestro canal de YouTube? ¡Suscríbete!
Aumento del salario: Cara o cruz
Grupos étnicos y facciones religiosas buscan el poder sirio
Con el décimo y otros bonos decembrinos, primero pague las deudas
Debates
Chancay: ventajas y desafíos