El Presidente Lenín Moreno aseguró que la vacunación contra el Covid-19 se estaba manejando con discrecionalidad, en el programa ‘De frente con el presidente’, organizado por la Secretaría de Comunicación de la Presidencia, con la presencia de los ministros de Salud, Mauro Falconí, y de Telecomunicaciones, Andrés Michelena.
Moreno dijo que eso se está corrigiendo porque no había un plan que considere actividades y clasificación etaria de la ciudadanía, de una forma técnica. De ahí que aseguró la falta de un plan de vacunación con procedimientos, metas, objetivos y actividades específicas.
“Es posible que haya diferencia de criterios con respecto a lo que debe ser un plan, no era un plan estructurado, que vaya a metas y objetivos (…). Se estaba vacunando sin considerar las actividades, clasificación por edades, a quién se atiende primero, eso no había y eso estaba siendo manejado con discrecionalidad”, dijo.
Al momento, existen 800.000 personas de la tercera edad inscritas en la página, 65.000 vacunas más llegarían este 24 de marzo, de Pfizer llegarían 60.000 más y están pendientes de otras farmacéuticas.
Moreno insistió en que si ciertos datos no estaban marcados en el plan, es que se manejó con discrecionalidad. “Con todo el respeto, la responsabilidad sin duda alguna recae sobre el Ministerio de Salud, no sobre los vacunados. La persona que determinó que había que vacunar a esas personas, yo jamás propuse que se vacune a ninguna persona, ni a mi padre que tiene 94 años, ni ningún familiar ha sido vacunado”, dijo.
El nuevo ministro de Salud, Mauro Falconí, manifestó que las responsabilidades deberán ser determinadas por la justicia. “Estamos mapeando dónde es necesario la priorización de la vacuna”, dijo al asegurar que la situación de los vacunados es confidencial, porque es un expediente clínico.
¿Ya conoces nuestro canal de YouTube? ¡Suscríbete!
Aumento del salario: Cara o cruz
Grupos étnicos y facciones religiosas buscan el poder sirio
Con el décimo y otros bonos decembrinos, primero pague las deudas
Debates
Chancay: ventajas y desafíos