“Los más violentos son aquellos individuos externos, pagados y organizados. Acaso creen ustedes que es coincidencia que (Rafael) Correa, Virgilio Hennández, Ricardo Patiño, (Paola) Pabón hayan viajado al mismo tiempo a Venezuela donde el sátrapa de (Nicolás) Maduro ha activado junto a (Rafael) Correa su plan de desestabilización, usando algunos sectores indígenas”, denunció el Presidente Lenín Moreno en una cadena nacional de radio y televisión.
Moreno dijo que conforme a las atribuciones constitucionales que le competen ha decidido trasladar la sede del Ejecutivo a Guayaquil para garantizar la paz y la tranquilidad de los ecuatorianos antes que su propio bienestar, ante la llegada de una marcha del movimiento indígena que reclama la derogación del decreto que libera los precios de la gasolina extra y el diésel.
El Presidente afirmó que lo que esta ocurriendo en Ecuador no se trata de una manifestación de protesta social sino de un intento de golpe de Estado canalizada desde Venezuela. “Nunca voy a claudicar en mis principios por un puesto, lo dije, yo estoy decidido. Gracias a todos los ecuatorianos que se decidieron por el orden, la paz y la democracia”, dijo.
Moreno estuvo acompañado de su vicepresidente Otto Sonnenholzner, de su ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín y altos mandos militares y ratificó las medidas económicas porque atacan directamente a los contrabandistas de combustibles y les quita cientos de millones de dólares.
“Cuando digo zángano me refiero a los ociosos y a los ladrones, por eso llamo a los sectores sociales al diálogo fraterno y sincero, una puerta que desde el Gobierno jamás se cerró”, aseguró.
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