El Tribunal de Garantías Penales del Azuay sentenció al mayor René C., a los subtenientes Byron G., Daniel M. y Nidia M., y a otros 33 policías por el delito de extralimitación en la ejecución de un acto de servicio en la cárcel de Turi, en Cuenca, y les impuso 106 días de privación de libertad. La Fiscalía había pedido procesarlos por tortura.
Los jueces ratificaron el estado de inocencia de cuatro policías e informaron que la decisión respecto a otra acusada lo darán a conocer luego de que culmine su estado de gestación.
Las 42 personas fueron investigadas por los hechos registrados el 31 de mayo de 2016, en el pabellón de Mediana Seguridad del Centro de Rehabilitación Social Regional Turi. En la audiencia de juicio, que culminó la noche del 14 de noviembre, los fiscales Carolina Ruiz y Esteban Coronel sustentaron la acusación por el delito de tortura con 9 pruebas documentales y 45 testimonios de testigos y peritos.
La investigación señala que el día de los hechos se realizó una requisa policial en el pabellón de Mediana Seguridad JC, con el objetivo de buscar objetos prohibidos dentro de las celdas. En la diligencia, dirigida por el mayor René C., también participaron los subtenientes Byron G., Daniel M. y Nidia M., así como 38 policías, entre ellos dos mujeres y 36 hombres, que pertenecen a los grupos Operativo, Administrativo y a la Unidad de Mantenimiento del Orden.
Durante el operativo las personas privadas de la libertad fueron sacadas de sus celdas y sin motivos los policías les insultaron, les agredieron físicamente con golpes de manos, pies y utilizando toletes, les echaron gas lacrimógeno y les aplicaron corriente.
Mientras las víctimas estaban acostados boca abajo sobre el piso los policías caminaron sobre sus cuerpos, sin consideración ni respeto a sus derechos, condiciones de salud y edad. Además les obligaron a desnudarse y ponerse en cuclillas para realizar ejercicios (el salto del sapito), en presencia de sus compañeros de celda y de los agentes policiales.
Estos hechos fueron relatados por 23 de las víctimas, varios de ellos asistieron a la audiencia de juicio, desarrollada en la sala de audiencias del Complejo Judicial de Cuenca. Otros participaron por videoconferencia desde los Centros de Privación de Libertad de Guayaquil, Latacunga, Riobamba y Cuenca, además desde el Complejo Judicial de Ibarra.
Durante la audiencia, la Fiscalía también presentó el testimonio del perito de Criminalística que realizó la pericia de audio y video. Seis videos contienen imágenes extraídos de las cámaras de vigilancia del Pabellón de Mediana Seguridad, en los cuales se evidencian los hechos.
El testimonio de un perito en informática determinó que los DVD son íntegros, no fueron manipulados y
son legítimos. También participaron como testigos el médico legista y el psicólogo, quienes describieron las lesiones que sufrieron las víctimas y el estrés postraumático como consecuencia de los hechos.
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