Lenín Moreno prefiere no asistir a las reuniones de AP en las que está Jorge Glas

El presidente de la República, Lenín Moreno, decidió no asistir a las reuniones de a directiva del movimiento Aliaza País, a las que asiste puntual el vicepresidente sin funciones Jorge Glas.

Doris Soliz, legisladora y exsecretaria ejecutiva de AP, confirmó que el Presidente, que también es presidente el movimiento, sí fue invitado, al igual que los directores provinciales y los integrantes de la directiva nacional. Hasta las 18:00, Moreno no llegó a la sede central, frente a la Tribuna de los Shyris, en Quito.

La Secretaría Nacional de Comunicación (Secom) informó que el Presidente se dedicaría a sus actividades de despacho todo el día.

La reunión de la directiva se dio en momentos en que la pugna en Alianza País cobra mayor fuerza. La legisladora Marcela Aguiñaga advirtió (antes de la reunión) que se velará porque cualquier propuesta del Régimen “no violente los procedimientos que establece la Constitución”, dijo en relación al llamado a la consulta popular.

Para Aguiñaga, la eliminación del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social afectaría la estructura del Estado. Doris Soliz adelantó que en la directiva no están de acuerdo con que se elimine la figura de la reelección indefinida de las autoridades de elección popular.

Alianza País tampoco está convencida de que se deba derogar la Ley de Comunicación o tratar de modificar la ley relacionada con la Plusvalía, a través de una consulta.

Según El Comercio, los dirigentes de Alianza País negaron que, por ahora, se esté pensando en expulsar a Lenín Moreno del movimiento. El Presidente había anunciado también que el dinero electrónico pasará a las manos de la banca privada desde inicios del siguiente año.

La primera figura en llegar a la reunión en la sede de Quito fue Gabriela Rivadeneira, legisladora y secretaria de AP. Ella tenía previsto dar un informe sobre le viaje a Europa que hizo y en el que se reunió con Rafael Correa. Luego se vio a Ricardo Patiño, exconsejero presidencial; Anabel Hermosa, concejal de Quito; los directores provinciales y el vicepresidente Jorge Glas.

En jerarquías, a Glas le correspondía dirigir la reunión, en ausencia del presidente del movimiento.