Con un memorando dirigido al presidente del Consejo Directivo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Germán Lynch Navarro presentó su renuncia, por motivos personales, al puesto de director de esa institución.
Lynch fue posesionado el 3 de enero y desistió de su nombramiento 5 días después, es decir, el pasado 7 de enero de 2024.
En su carta de despido dijo que “Reitero mi compromiso con la institución y la firme convicción de que salvaguardar los intereses de nuestros afiliados debe estar siempre en primer lugar”.
Al momento de asumir el cargo, Lynch había anunciado que impulsaría un plan estratégico ABC: Aumentar el abastecimiento de medicinas; Bajar las deudas con proveedores; Cobrar a los morosos.
Lynch, de 41 años, cuenta con más de 20 años de experiencia en el área de gestión y administración de organizaciones. Dentro de su perfil se destaca que fue coordinador general de la Federación Nacional de Cámaras de Comercio de Ecuador así como también director Ejecutivo del Idepro, la Escuela de Negocios de la Cámara de Comercio de Guayaquil.
La renuncia del nuevo director se da en medio de un proceso anunciado para optimizar la nómina de casi 35.000 empleados que tiene el IESS. Ese proceso inició con la desvinculación de alrededor de 500 personas del Hospital Carlos Andrade Marín.
El presidente del Directorio del IESS, Eduardo Peña Hurtado, ha denunciado irregularidades, e incluso abusos, en contratos laborales y una reforma integral que se presentaría en un máximo de ocho meses en la Asamblea. Esa reforma tendría una primera parte para modificar el cálculo de las pensiones; y una segunda parte para cambios en los tiempos de aportación y el posible cobro por las atenciones de los hijos de los afiliados, entre otros temas.
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