La dualidad CEO-Chairman no siempre es buena

miércoles, febrero 12, 2020

La investigación desarrollada a lo largo de un año, que será presentada este 13 de febrero a las 18:00 en el aula INECEM de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la UCSG, se enfocó en las grandes empresas concentradas en Guayaquil, Quito y Cuenca donde la dualidad es más importante dada la naturaleza del gobierno corporativo

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El gobierno corporativo es una figura que se maneja a escala mundial, cuya relevancia incrementa a partir de las crisis financieras internacionales. Esas crisis crearon la necesidad de generar cuerpos colegiados de control para ayudar a garantizar el buen uso de los recursos de los accionistas y la consecución de niveles adecuados de rentabilidad.

Varias investigaciones a nivel internacional han intentado explicar cómo el gobierno corporativo incide sobre el desempeño financiero de las empresas, que es medido como un indicador de la efectividad de su trabajo.

Al analizar todas las aristas de investigación en este campo, por un equipo de investigadores de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, fue posible establecer que la dualidad es un fenómeno que poco a poco gana terreno y esto ha inducido a las empresas a sacrificar la presencia de un presidente de Directorio, por tener costos más atractivos o más bajos, para dejar ese rol al gerente general o CEO.

Ahí se genera esa dualidad aparentemente atractiva, porque sí afecta ciertos procesos importantes en las funciones de control del Directorio.

La figura del presidente del Directorio es muy importante dado que el CEO puede tomar decisiones perjudiciales para los recursos de los accionistas y ahí es donde entra el Directorio, para el control del capital y el cumplimiento de esquemas estratégicos.

La dualidad CEO-Chairman no siempre es buena, porque afecta ciertos indicadores importantes como el desempeño de sectores independientes. En las empresas muchas veces se opta por tener un Directorio de papel lo que ya implica una dualidad, entonces quien toma las decisiones en realidad es el CEO y el presidente del Directorio es solo un representante. Esta situación, aparentemente es atractiva en términos de costos, resulta ser perjudicial en términos de procesos.

Hay muchas investigaciones en torno a este tema, que no siempre arrojan los mismos resultados. En algunas economías, cuando hay dualidad, pueden mejorar las condiciones financieras de la empresa o perjudicarlas.

No existe un equilibrio para determinar si la dualidad hace bien o mal, pero en la economía ecuatoriana ayuda a explicar el desempeño de los directores independientes y del gobierno corporativo de las empresas.

En el ámbito académico la eficacia del gobierno corporativo siempre fue medida de forma parcial, porque los indicadores recogidos estaban incompletos. Por eso en esta investigación usamos un cuestionario para analizar de forma agregada, holística, el funcionamiento del gobierno corporativo asentado en cuatro constructos: el desempeño del director independiente, la transparencia de la información, la capacidad de evaluar las gestiones gerenciales y las habilidades del Directorio para manejar los riesgos.

Ahí está la relevancia de estudiar el fenómeno de la dualidad CEO-Chairman y cómo esto puede influir sobre la efectividad del control del Directorio, válido en las pequeñas, medianas y grandes empresas, porque así lo obliga la ley.

La investigación desarrollada a lo largo de un año, sin embargo, se enfocó en las grandes empresas concentradas en Guayaquil, Quito y Cuenca donde la dualidad es más importante dada la naturaleza del gobierno corporativo.

Una investigación de este tipo siempre será compleja porque tiene como base un cuestionario cuyas respuestas pueden ser un poco sesgadas, con información a veces irreal, por lo que fue necesario hacer pruebas para descartar datos. En muchas ocasiones se repitieron los procesos para asegurar que ciertos indicadores sean confiables.