Mientras la gente corría de un lado para otro, Correa deambulaba

sábado, junio 8, 2019

Puede ser considerado un hereje, porque hereje es el que elige. Lo ha dicho él mismo en un artículo escrito sobre el psiconanálisis y la política donde abordó una conferencia ofrecida por el psicoanalista Jacques Alain Miller, en 2017, en Madrid. Miller es fundador de la Asociación Mundial de Psicoanálisis, de la que Antonio Aguirre Fuentes es parte. Los psicoanalistas, dijo Miller, dirían algo dirigido a todos los hombres y mujeres, a la polis, al mundo donde los políticos de hoy, esos híbridos de ambición y canallada, han dejado poco lugar para una dirección razonable y sensata. Bajo su mirada y con la dirección de Jessica Jara, Antonio Aguirre Fuentes ha sido el maestro de ceremonias de unos diálogos donde, desde diferentes perspectivas, se abordó la imposibilidad de gobernar. Y ahí es donde entra un tema tan contemporáneo como antiguo, los populismos o los caudillismos, como lo redefine. Nos recibe en su casa, en la Kennedy nueva, en el corazón de Guayaquil. Su consultorio está en una especie de altillo al que se llega por un largo zaguán que cruza un jardín con enredaderas, macetas colgantes, plantas de limón meticulosamente cuidadas. En su clínica, un diván, un escritorio y una pequeña sala donde se desarrolla la conversación

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