Las declaraciones de Luiz Mameri, exdirector de Odebrecht para América Latina, sobre el pago del uno por ciento de comisión para el exvicepresidente Jorge Glas, a través de su tío Ricardo Rivera, por cada obra que realizó la empresa, ha puesto en jaque a la defensa de Glas y sus partidarios, entre ellos, el expresidente Rafael Correa. Con este sistema Odebrecht habría recibido 15 contratos por $4.409 millones.
La confesión de Mameri es una delación premiada y corresponde a aquellas que hicieron uno por uno los 77 ejecutivos de Odebrecht. Mameri se acogió a una rebaja en la pena, gracias a que su confesión, que fue acompañada de documentos, testimonios y otros elementos corroborados por la justicia brasileña
Mameri explicó que la empresa hacía negocios principalmente con gobiernos y que durante estas dos últimas décadas Odebrecht creció hasta facturar más de mil millones de dólares al año, por lo cual los sobornos se volvieron parte de la estructura, aunque su manejo era conocido por un grupo muy selecto de ejecutivos ligados al dueño Marcelo Odebrecht.
El subsecretario de Acción Política de la Presidencia, Iván Granda, ahora sigue las pistas de su testimonio y pidió a la Fiscalía General del Estado solicitar a su par brasileña toda la información que Mameri entregó en Brasil para sustentar su testimonio.
“Estamos haciendo contactos con Brasil para poder obtener toda esa información”,dijo la Fiscal encargada, Ruth Palacios. Ella aseguró que la declaración de Mameri no se encuentra en el expediente abierto contra Glas.
Las delaciones de Mameri, reveladas por diario El Universo en días pasados, se hicieron en diciembre del 2016 y en uno señala que aprobó coimas para el exsecretario jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, quien ha negado haber recibido dinero de la constructora. Cinco meses después, el entonces Fiscal general, Carlos Baca, fue a Brasil para recabar información del caso Odebrecht. Pero ese testimonio nunca trascendió.
“A mediados del 2011 (…), mi subordinado (José Conceiçao Santos), me informó que lo buscó un interlocutor del entonces ministro Jorge Glas -dice Mameri- (y) que se debían hacer pagos al ministro por un acuerdo realizado por él del 1% sobre el valor de todos los contratos obtenidos a través del Ministerio de Sectores Estratégicos”.
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