Con un gol de Samuel Umtiti, el combinado de Francia se metió a la final del Mundial de Rusia 2018, en un partido que dejó en el camino a la poderosa selección de Bélgica, en lo que se consideraba una final anticipada.
Un solitario gol bastó a Francia, campeón del mundo en 1998, para entrar en la final que se definirá con el ganador de la otra semifinal que disputarán mañana, miércoles 11 de julio, entre Croacia e Inglaterra.
El defensor francés anotó el gol a los 51 minutos cuando se adelantó a la defensa rival para rematar de cabeza un tiro de esquina enviado por Antoine Griezmann desde la punta derecha.
Bélgica generó las llegadas más peligrosas en la primera media hora del partido disputado en el estadio de San Petersburgo, en la que Francia no parecía tener respuestas para el planteo de su rival.
Poco a poco Francia fue nivelando las acciones y estuvo cerca de anotar a los 40 minutos con un potente disparo de Benjamin Pavard que el portero Thibaut Courtois desvió con el pie derecho.
Pero a Bélgica le costó llevar el peso del encuentro tras el gol encajado, algo a lo que no están acostumbrados. Hazard volvió a ser el mejor de su equipo, pero su calidad no fue suficiente. Lloris se mostró muy seguro bajos palos para evitar el empate y Courtois evitó una goleada mayor en los minutos finales.
Con esta victoria, los franceses pasaron a la tercera final de un Mundial en los últimos 20 años. Una la ganó, en 1998, como anfitrión. La otra la perdió, en Alemania 2006 frente a la selección de Italia.
Por el tercer lugar, Bélgica deberá enfrentar al perdedor del partido de la otra semifinal, entre Inglaterra y Croacia.
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