Ricardo Rivera, detenido en las investigaciones por el caso de los sobornos de la constructora brasileña Odebrecht, reconoció haber mantenido conversaciones por correo electrónico con su sobrino, el vicepresidente Jorge Glas, y haberle dado a conocer varios temas relacionados con el campo de las telecomunicaciones.
Según Rivera, que llegó el viernes a Quito desde Guayaquil con escolta policial para dar sus declaraciones en la Fiscalía, dijo que entre los procesados solo conoce a Glas y a José Santos, exdirectivo de Odebrecht en Ecuador; además, reconoció haber viajado a China, pero no en representación del Gobierno ni del expresidente Rafael Correa, sino que fue una visita y participación personal y de carácter privado.
Rivera dijo que sobre el testimonio anticipado de Santos no existe prueba alguna.
Santos en su testimonio anticipado, rendido el miércoles último, aseguró que en junio del 2011 Rivera lo buscó para decirle que él era la persona que intermediará los negocios del sector estratégico para Jorge Glas. De parte de Odebrecht, Santos habría entregado al tío del vicepresidente cerca de $ 16,1 millones, entre 2011 y 2016.
Aníbal Quinde, abogado de Rivera, dijo que su cliente reprochó en su totalidad el pendrive entregado por su empleado Alfredo A., pues fue obtenido de manera ilícita.
En varias entrevistas radiales, Glas reiteró que es inocente y no hay pruebas de que cometió algún acto de corrupción
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