La visita del presidente de China, Xi Jinping, por primera vez a Ecuador es un acontecimiento importante, sin duda, porque significa que estamos generando una oportunidad para hacer negocios, para fomentar inversiones, aunque la relación estratégica del Gobierno de Ecuador con el Gobierno de China se da por la necesidad del Ejecutivo de captar recursos para financiar todo el gasto y la inversión pública que está haciendo. Ahora en términos de comercio hay que ir un poco más allá, porque la visita puede ser una ventana para generar realmente oportunidades de negocio para los empresarios ecuatorianos, apalancada un poco con las facilidades de acceso que pueda dar el Gobierno en China en toda la parte normativa sanitaria y fitosanitaria.
Porque una cosa son las inversiones, el flujo que coloca China a una tasa de interés muy rentable para ellos, y otra cosa muy diferente es el comercio exterior que depende de barreras arancelarias y no arancelarias. Lastimosamente para el caso ecuatoriano, en el sector agrícola el gobierno chino maneja muchas barreras sanitarias y fitosanitarias, y eso obstaculiza el acceso de productos ecuatorianos de característica agro primaria.
Las trabas comerciales también tienen mucho que ver con los costos logísticos porque, además, somos competidores directos con productos que se fabrican o se cultivan en Filipinas, Singapur, Vietnam, que están al lado de China; lógicamente las exportaciones desde esos países a China resultan más económicas que las exportaciones desde Ecuador.
Lo que tiene que hacer el Gobierno de Ecuador ahora es moverse en China para homologar procesos y facilitar el tema sanitario y fitosanitario y así permitir el acceso de productos ecuatorianos con ventajas competitivas por un lado, y por otro apoyar a los exportadores a mejorar su estructura de costos en la parte logística.
De ahí que a Ecuador sí le convendría firmar un acuerdo comercial con China porque vendemos productos complementarios que no se producen y no se cultivan en China y son altamente demandados de países como Filipinas, Singapur y Vietnam. Al tener un esquema de acuerdo comercial de carácter recíproco gana la oferta ecuatoriana porque se pueden disparar las exportaciones. Actualmente, la barrera arancelaria es uno de los principales obstáculos en cuanto al encarecimiento de productos ecuatorianos que van hacia el mercado chino.
En resumen, el comercio con China es un tema arancelario que depende de las negociaciones entre el Gobierno ecuatoriano y el Gobierno chino; es un tema no arancelario que también depende de las negociaciones que pueda hacer Ecuador con China para homologar y facilitar el cumplimiento de normativas sanitarias y fitosanitarias, y, por último, también es un tema de costos, en la parte logística, flete marítimo, flete aéreo para transportar y movilizar los productos ecuatorianos hacia ese gran mercado.
China sin duda un importante mercado para Ecuador porque tiene 1.400 millones de consumidores; la costa de China es muy importante en cuanto a desarrollo, ahí están las ciudades más importantes como Zhanjiang, Shénzhen, Guangzhou y Hong Kong, que son los polos de crecimiento y donde hay mucho consumo, donde los productos ecuatorianos pueden tener una demanda muy importante que, a la larga, representa mayores ingresos para el país.
Desde lado del Ejecutivo se espera que la visita de Xi Jinping le garantice asegurar y mantener las líneas de crédito; este Gobierno necesita mantener una línea de crédito prominente desde China para seguir financiando su gasto público, las inversiones; en el sector privado lo que se espera es que esta visita sea la base para firmar un acuerdo comercial que facilite desde la parte arancelaria y no arancelaria, el ingreso de productos hacia ese mercado.
China lo que demanda de la región es materia primaria, ve a América Latina como el gran proveedor de insumos primarios a nivel de metales, a nivel de productos agrícolas necesarios para mantener y sostener su crecimiento y desarrollo económico.
Uno de los errores del Gobierno, sin embargo, ha sido alejarse del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico cuyo mercado más importante lo constituye China, y una prueba de ello es que el siguiente destino de Xi Jinping sea Lima a la reunión de líderes de ese foro interregional. No hay que olvidar que China está interesada en negociar bajo una figura de bloques de países, más que país por país. Y la visita de Xi Jinping a Lima es justamente un espaldarazo a todo ese proceso y una muestra de la buena voluntad de China para avanzar en la integración comercial.
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