En Puerto Príncipe ya se encuentra un batallón con 200 efectivos enviados desde África para enfrentar a las bandas armadas que asolan a la isla caribeña desde hace veinte años
El miércoles había expirado el toque de queda de 72 horas, decretado ante la situación de inseguridad motorizada por los grupos armados que piden la dimisión del primer ministro Ariel Henry