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¿Debemos preocuparnos por el hongo negro?

Alexis Benjasmin Manrique Guzmán
Universidad Técnica Particular de Loja
jueves, junio 24, 2021
El personal médico está tratando adecuadamente el Covid-19; el problema es que los pacientes no se conforman con que se les recete paracetamol, reposo y liquido en casa, piensan que no es suficiente y se suministran  medicamentos recomendados por sus amigos
Tiempo de lectura: 5 minutos

El hongo negro no es nuevo, pertenece a un género llamado mucor, una familia de hongos que usualmente están en la tierra del abono de las plantas o en los vegetales en estado de putrefacción. Este hongo no genera problemas en personas inmunocompetentes, es decir, que tengan su estado inmunitario normal, sino que afecta a las personas con un sistema inmunológico delicado y comprometido por ciertas enfermedades, como la diabetes, insuficiencia renal avanzada, pacientes con sobrecarga de hierro o VIH.

A esta infección se la denomina hongo negro por la coloración negruzca que deja en la periferia o del lado de las lesiones en la nariz. Afecta el tejido y por eso se llama rhinocerebral, lo que puede producir problemas a la nariz, en el cerebro, en el ojo debido a que contamina los senos paranasales y puede invadir los vasos sanguíneos es por eso que también puede producir problemas digestivos.

Este es un hongo del que se tiene conocimiento desde hace mucho tiempo, pero ahora ha tomado mucha importancia debido a los casos tan dramáticos que se han visto en la India y unos pocos casos en Latinoamérica, específicamente en Paraguay, Chile, Brasil y México.

El problema se centra en la gran cantidad de pacientes que se registraron en la India y recientes publicaciones científicas señalan que las condiciones de ciertos sectores de ese país, sumado a sus rituales y tradiciones relacionados con el excremento de la vaca, hicieron perfectas las condiciones para que se produzca el caldo de cultivo de la mucormicosis.

El hongo negro está presente en varios lugares, como en los vegetales en descomposición, en el abono que está conformado por heces de los animales rumiantes y también algunas plantas que salen como esporas en el organismo. Y en zonas tradicionales, donde las personas se cubren el cuerpo con estiércol de la vaca con la creencia de que podrían curar el Covid-19 o a su vez protegerlos de este virus.

El cuerpo de la persona con el estiércol de vaca lo dejan secar y posteriormente se echa la leche de la vaca para retirar el estiércol. En este proceso las personas entran en contacto con el mucor; las vacas se alimentan de pasto y en su proceso de digestión no llegan a eliminar todo lo que está en los vegetales, la celulosa y todo lo que contiene, incluido el mucor, dando lugar a una fácil contaminación. Son rituales que en nuestra cultura se pensaría absurdo, pero cada cultura tiene sus creencias.

Otro aspecto que ha empeorado el cuadro de las infecciones con mucormicosis es el uso de esteroides para tratar el Covid-19. El suministro de esteroides sin supervisión médica ha generado, además, otros problemas. En los pacientes bajo el tratamiento de esteroides su sistema inmunológico se ve debilitado, lo que lo predispone para adquirir esta patología.

En pacientes diabéticos de alto riesgo, aumenta la glucosa y el esteroide actúa disminuyendo las defensas del organismo y de esta manera reduce la inflamación y disminuye la respuesta del organismo ante el nuevo coronavirus.

En la India cientos de pacientes que se han infectado de Covid son diabéticos y han recibido esteroides como tratamiento por determinado periodo de tiempo. De aquellas personas algunas han presentado infección por mucormicosis, la misma que se hace visible a los 12 a 18 días de haberse curado clínicamente del Covid-19.

En varios países de Latinoamérica, incluido Ecuador, se ha utilizado esteroides como parte del tratamiento para tratar casos de moderados a severos de Covid-19; sin embargo, no se han tenido infecciones graves de mucormicosis, esto se debe a que no se tiene un acercamiento directo al hongo como ocurre en la India.

Otro factor que dio paso a las infecciones de hongo negro en la india fue la escasez de oxígeno. Tanto en la India como en Ecuador los gobiernos y los organismos han hecho un esfuerzo por dar mayor acceso al oxígeno domiciliario. Sin embargo, en la India empezaron a utilizar el oxígeno de tipo industrial y esto ocasionó que haya contacto del mucor con los pacientes. Hay artículos que demuestran que en el oxígeno industrial se ha detectado el hongo.

Con respecto a Latinoamérica y a Ecuador no se puede decir que no hay posibilidad de que aparezca el hongo negro; en esta región el uso de esteroides como tratamiento podría predisponer la aparición de esta infección. Es importante mencionar, que el uso de esteroides de forma adecuada y limitada siguiendo las pautas correctas es favorable, el problema se presenta cuando se hace un uso incorrecto del mismo, debido a que no todos los pacientes van al médico y menos a un especialista.

Uno de los problemas con el que se ha batallado durante este tiempo de pandemia ha sido la automedicación; muchas personas con síntomas leves no van a consulta médica, sino que siguen las recomendaciones que le sirvió a un amigo o familiar. En ocasiones las personas optan por solicitar a sus médicos recetas con cantidades exageradas de medicinas como azitromicina o dexametasona para automedicarse.

Esta afección es adquirida por esporas en el aire, pero  difícilmente de persona a persona; en cierta manera esto hace más fácil la prevención de las personas susceptibles a adquirir este tipo de micosis.

La detección de esta infección se la puede hacer basada en problemas nasales como sintomatología, inflamación de la nariz, sangramiento, sinusitis que avanzaba violentamente, dolor e hinchazón ocular y la característica coloración negruzca que puede presentarse en pocos días. Este hongo puede afectar también los pulmones, pero es menos frecuente.

En el caso de pacientes que pertenecen al grupo de alto riesgo, que por necesidad usan esteroides, siempre deben tener los cuidados adecuados por su médico de cabecera. Los pacientes con hipertensión no se ven afectados ya que la hipertensión no produce inmunodepresión.

Y otros pacientes con trasplantes de órganos, con insuficiencia renal crónica y los pacientes que están en diálisis son menos probables que se afecten porque están constantemente vigilados por los nefrólogos y especialistas. Los pacientes con cáncer también reciben inmunosupresores y se realizan quimioterapia. Todos deben estar en constante control médico y a la mínima preocupación actuar de inmediato.

Es importante dar mayor publicidad de este tema, no con el fin de generar pánico en la población, sino para que todos puedan están bien informados respecto a los cuidados que se debe tomar en cuenta para evitar estas infecciones.

El personal médico está tratando adecuadamente el Covid-19; el problema es que los pacientes no se conforman con que se les recete paracetamol, reposo y liquido en casa, piensan que no es suficiente y se suministran  medicamentos recomendados por sus amigos. Estos cocteles medicinales pueden ser perjudícales y empeorar casos leves.

 

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