La misión del gobierno ecuatoriano ha sido tratar de bancarizar las personas de una población económicamente activa sin cuentas y que esta haga uso del dinero electrónico por medio de un móvil e internet, pero ¿cuál es el nivel de confianza que tiene la población hacia el dinero virtual?
El dinero en términos de negocios es confianza. El empresario o la población en general necesita conocer y creer en el administrador. Es decir, las personas quieren saber ¿quién va a crear las condiciones de la transacción?, ¿quién va a administrar su dinero electrónico? Es parte de la aceptación.
En el país, el Banco Central ha sido el responsable de la administración del dinero virtual entre el 2015 y el 2017. En ese lapso se abrieron 288.336 cuentas. Pero recientemente el presidente Lenín Moreno propuso que esta modalidad deba pasar a manos también de la banca privada para ver cuál es el nivel de receptividad del ecuatoriano hacia el dinero electrónico bajo otro administrador.
Las negociaciones avanzan a buen ritmo y se espera que a corto plazo los bancos privados cumplan con la operatividad para trabajar también con esta modalidad.
El uso del dinero electrónico no es exclusivo del Ecuador. Alrededor del mundo crece esta tendencia. Y es muy positivo para el país que el proyecto haya sido puesto en marcha ahora con la banca privada. En primer lugar, por términos de seguridad ya que la persona no tendría que cargar dinero en efectivo a la mano y facilitará el intercambio comercial. El dinero electrónico aceleraría los sistemas de producción por la velocidad con que éste se mueve.
La lógica es que las personas no se queden fuera del sistema financiero, sino que tengan una billetera móvil que les permita hacer pagos. Su uso es muy sencillo mediante el celular, el sistema es seguro y está respaldado en su totalidad con dólares físicos ya que el gobierno ha planteado su masificación con la participación de la banca privada.
La idea también es insertar a todas las cadenas de consumo y del comercio. Es un producto pensado para el consumidor y la misión del mismo es generar satisfacción por medio de la confianza transaccional.
En términos de finanzas el dinero electrónico es una herramienta positiva para el movimiento económico de cualquier nación. En el país, esta tecnología denominada USSD (Unstructured Supplementary Service Data) sirve para cualquier teléfono móvil y se utiliza para tener el dinero en efectivo y no billetes o monedas a la mano mediante una transferencia de cuenta a cuenta.
Es un sistema innovador donde el usuario tiene el abanico de posibilidades para pagar entre ellas puede realizar pagos recurrentes por los servicios de luz, agua y teléfono. El dinero electrónico en realidad es una plataforma tecnológica para darle velocidad al flujo de dólares y para generar mayor productividad. Es una nueva modalidad que se presta para facilitar el consumo y el intercambio comercial.
El sistema de administración y la confianza es la clave para lograr que el dinero virtual propuesto sea utilizado y aceptado por la población en general. Fortalecer la dolarización e incluir a la población no bancarizada es la misión de las autoridades económicas y de los bancos del país.
Solo hay que esperar y ver hasta dónde llega la negociación entre la banca privada y el gobierno.
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