La Bienal de Cuenca: un legado de arte, cultura y compromiso con el futuro

martes, junio 17, 2025

La Bienal de Cuenca regresa en 2025, en su edición número 16, como uno de los eventos culturales más importantes del país y la región. Además de marcar el arte contemporáneo en Ecuador, transforma a Cuenca en un centro artístico internacional, impulsa el pensamiento crítico, el diálogo cultural y la participación ciudadana. Este año, la UTPL se suma como aliada estratégica, apostando por la innovación, la inclusión y la proyección global.

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Del 24 de octubre de 2025 al 1 de febrero de 2026, la ciudad de Cuenca volverá a convertirse en epicentro del arte contemporáneo con la realización de la XVI Bienal de Cuenca, uno de los eventos culturales más relevantes de Ecuador y América Latina.

Organizada por la Fundación Bienal de Cuenca, esta nueva edición renueva el compromiso de la Bienal con la difusión del arte contemporáneo, el pensamiento crítico y la promoción del diálogo intercultural. En esta ocasión, la Bienal contará con un aliado estratégico: la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL), con la que se ha suscrito un convenio de cooperación que impulsará la participación académica, cultural y formativa dentro del evento.

Una historia que enriquece el país

Desde su primera edición en 1987, la Bienal de Cuenca ha sido un pilar en la escena artística ecuatoriana. Nació como un espacio para la plástica contemporánea latinoamericana, y con el tiempo amplió su alcance hacia una plataforma global de experimentación, pensamiento y producción artística.

En sus quince ediciones previas, han participado artistas de renombre como Doris Salcedo (Colombia), Tania Bruguera (Cuba), León Ferrari (Argentina), Luis Camnitzer (Uruguay), y Esther Shalev-Gerz (Israel/Suecia), entre muchos otros. También ha sido un trampolín para artistas ecuatorianos emergentes, cuyas obras han sido reconocidas y premiadas internacionalmente gracias al impulso de la Bienal.

Uno de los aportes más valiosos ha sido la creación de la Colección Bienal de Cuenca, integrada por obras premiadas y donadas a lo largo de los años, que constituyen un patrimonio cultural de arte contemporáneo para el país. Esta colección se conserva, investiga y difunde como un bien público de valor simbólico y educativo.

Impacto en la ciudad y el país

La Bienal no solo dinamiza el ámbito artístico; también transforma la ciudad. Cuenca se convierte durante varios meses en una galería viva, donde museos, espacios públicos, centros culturales y calles albergan obras, instalaciones y encuentros. Este ecosistema activa el turismo, promueve la participación ciudadana y proyecta a la ciudad como una capital creativa del continente.

La dimensión social también ha crecido. En ediciones recientes se ha incorporado la sostenibilidad, el decrecimiento y la economía circular como ejes curatoriales. Se promueve además la participación activa de la comunidad, con talleres, mediaciones, encuentros pedagógicos y visitas guiadas.

La Bienal de Cuenca forma parte de la Asociación Internacional de Bienales (IBA), lo que confirma su relevancia y proyección en la red global de eventos de arte.

¿Qué esperar de la XVI Bienal?

Aunque aún no se ha hecho pública la lista completa de artistas participantes para la edición 2025–2026, ya se ha confirmado que la curaduría estará a cargo de Catalina Lozano, reconocida investigadora y curadora colombiana, cuyo trabajo ha sido elogiado en bienales de Berlín, São Paulo y Liverpool. Su enfoque suele integrar temas como historia, memoria, colonialismo y territorialidades, por lo que se espera una edición intensa, reflexiva y de alta calidad conceptual.

Además, se fortalecerán las residencias artísticas, las colaboraciones con universidades y los vínculos con el mundo editorial y académico.

La UTPL se une al proyecto

En este contexto, la firma del convenio entre la Fundación Bienal de Cuenca y la UTPL, realizada el martes 17 de junio en el Rectorado de la Universidad, sella una alianza significativa. La UTPL aportará desde su experiencia académica, investigativa y de vinculación con la sociedad, abriendo espacios para la reflexión y la participación de estudiantes y docentes.

Este acuerdo también refuerza la dimensión educativa de la Bienal, con posibilidades de desarrollo de contenidos conjuntos, investigación, difusión editorial y formación cultural.

Con esta alianza, la UTPL se suma al impulso de uno de los proyectos culturales más importantes del país, consolidando el puente entre la universidad, el arte y la sociedad.