En menos de una semana, el riesgo país ecuatoriano bajó más de 100 puntos y se ubicó como la mejor cifra de los últimos 13 meses. Para el 8 de marzo, el índice fue de 1 236 puntos, según el reporte del Banco Central del Ecuador.
La tendencia se ha mantenido durante los últimos tres meses, en los que la cifra bajó 905 puntos, tras haber marcado el pico máximo en tres años con 2 141 puntos, el 13 de diciembre de 2023.
El anuncio del presidente Daniel Noboa sobre el inicio de negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en busca de un nuevo acuerdo crediticio, es el principal motivo de la mejoría, según los expertos.
Un posible acuerdo crediticio con el FMI mejora la posición de Ecuador
Este viernes, 8 de marzo, la directora de Comunicación del FMI, Julie Kozack, confirmó en una rueda de prensa que “hace pocas semanas las autoridades ecuatorianas solicitaron oficialmente iniciar negociaciones para alcanzar un potencial nuevo programa con Ecuador”.
Kozack reconoció que la crisis de violencia que afronta el país se ha vuelto un desafío para la sostenibilidad macroeconómica y fiscal de Ecuador y señaló que el FMI sigue de cerca la evolución de la situación en el país y desea que siga mejorando la seguridad y bienestar de todo el pueblo ecuatoriano.
Consultada por las garantías y compromisos que el FMI pediría a Ecuador para aprobar este eventual acuerdo, la portavoz señaló que darán más información a medida que avancen las negociaciones. Se prevé que estas comiencen en las próximas semanas, según comentó el miércoles el director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Rodrigo Valdés.
En esa conversación, Valdés habló de la posibilidad de que Ecuador tenga dos programas de crédito del FMI a la par, con un nuevo servicio ampliado (SAF) que, si funciona bien, puede llevar a un servicio de resiliencia y sostenibilidad (SRF), instrumento que tiene como tope máximo mil millones de dólares.
Las reformas que debería implementar el país
Ecuador completó en 2022 por primera vez en más de veinte años un programa crediticio (SAF) con el FMI, que ascendió a USD 6.500 millones por el lapso de 27 meses. Esto aunque quedaron medidas pendientes, como las auditorías a Petroecuador, que estuvieron dentro de los acuerdos.
En un reciente informe de valoración del acuerdo crediticio culminado en diciembre de 2022, el FMI sugirió a Ecuador profundizar las reformas que quedaron incompletas durante el programa, en concreto la progresiva eliminación de los subsidios a los combustibles y la reforma tributaria.
Precisamente, entre las medidas emprendidas por Noboa está contemplada una focalización de los subsidios a los combustibles, que el año pasado supusieron un gasto estatal de unos USD 3 200 millones al mantener congelados al público los precios de las gasolinas de 85 octanos y del diésel.
Asimismo, ha logrado sacar adelante su iniciativa de elevar el impuesto al valor agregado (IVA) del 12 % al 15 % desde abril, lo que el Gobierno prevé que le puede reportar ingresos adicionales por USD 1 300 millones.
También ha planteado dilatar el plazo de cierre y desmantelamiento del Bloque 43-ITT, uno de los principales yacimientos petroleros de Ecuador, que reporta ingresos de unos USD 1 200 millones al año, según cifras oficiales, y que los ecuatorianos votaron el año pasado a favor de su cese en un plebiscito nacional.
El objetivo de estas medidas es reducir el déficit fiscal que recibió Noboa al iniciar su mandato. Este asciende a unos USD 4 800 millones, lo que equivale a casi el 5 % de su producto interior bruto (PIB).
Texto original de Ecuavisa