Dada la magnitud global de la empresa multinacional del narcotráfico, nos conviene desdolarizar la economía y así hacer menos rentable el negocio de tráfico de drogas desde Ecuador. Aparte de esta razón de peso, no existe otra que justifique técnicamente la desdolarización de nuestra economía.
Según los entendidos, la dolarización es un proceso de sustitución de la moneda local por el dólar de estados unidos de norteamérica, como reserva de valor, como unidad de cuenta, y, como medio de pago y de cambio.
La dolarización fue una decisión autónoma y soberana de la Administración de Gobierno de Ecuador (2000), de utilizar el dólar como moneda genuina. A la par, la sociedad ecuatoriana y sus decisiones de efectivo dieron fundamento para el cambio, pues lo percibían como una protección contra la pérdida de valor de la moneda nacional (sucre), por la inflación galopante y, por las fluctuaciones del tipo de cambio.
En palabras claras, la economía ecuatoriana estaba informalmente dolarizada. Esa falta de confianza e inestabilidad financiera, llevaron a oficializar la dolarización, por parte del Sr. Presidente Jamil Mahuad. Luego de un poco tiempo el país recuperó la confianza y la estabilidad gracias a: operaciones de comercio exterior, inflación estabilizada, tasas de interés similares a las internacionales, cero especulaciones de la divisa, eliminación de la emisión de dinero sin respaldo, entre otros.
Han pasado 24 años, gracias a la dolarización, los gobiernos de turno han visto limitadas sus intenciones de emitir dinero para financiar programas populistas. Aunque a pesar de ello, se encontraron ciertos subterfugios técnicos y no técnicos para hacerlo (Uso de las reservas internacionales y del IESS). Por eso estamos como estamos.
La dolarización se nutre de los activos financieros, circulantes y depósitos de nacionales en el exterior. Las exportaciones, las remesas de nacionales, los préstamos otorgados a nacionales privados y públicos, las inversiones financieras y productivas del exterior y los depósitos nacionales en el exterior, sostienen la dolarización. Es decir, hacen posible que exista equilibrio entre la economía real y la economía financiera. Al mismo tiempo, las importaciones, los pagos de capital e intereses de la deuda privada y de la pública, y los réditos de las inversiones, impactan en el flujo neto de los dólares hacia la economía ecuatoriana.
Si el gobierno promueve las exportaciones de nuevos productos a nuevos mercados, es que está tratando de apuntalar la dolarización, pues el flujo neto de exportaciones menos importaciones será positivo e ingresará a la economía del país.
Si las remesas de los nacionales disminuyen, afectan parcialmente a la dolarización. En la generalidad de los casos, este rubro es una contribución neta positiva a la dolarización, pues no existe salida de dinero, sino solo en el caso de pago a los coyoteros para que familiares emigren del país.
El financiamiento privado y público está atado al riesgo país y por tanto el flujo de ingreso de divisas a la economía, dependerá de la sostenibilidad de los proyectos que originaron el financiamiento. Una falta de pago de los créditos, privada o pública, reduciría las opciones de mantener un flujo positivo de divisas. Se perderían esas fuentes y el efecto sería totalmente negativo, pues habría que pagar capital, intereses e intereses de mora. Un mayor flujo hacia afuera. Por eso es importante mantener acuerdos con los organismos de crédito internacionales y cumplir con los acuerdos establecidos.
Las inversiones financieras o productivas constituyen un flujo real de recursos generando impactos positivos como: empleo, encadenamientos productivos, compras nacionales, pago de impuestos, entre otros. Los réditos de estas inversiones, en el tiempo, reducen el flujo neto. Este rubro de fortalecimiento de la dolarización, es creo, el más importante, por sus efectos. Por tanto, cualquier gobierno, en sano juicio, buscará implementar estrategias y mecanismos para atraer inversiones al país. Si ellas, adicionalmente están focalizadas en actividades de producción exportable, el impacto en la dolarización es doblemente positivo. El mecanismo de Zonas Económicas Especiales ha sido utilizado con excelentes resultados.
La decisión del Sr. Presidente Noboa de registrar en el SRI las inversiones de nacionales en el exterior, es una medida concreta para contribuir a la sostenibilidad de la dolarización pues esos recursos invertidos en el exterior son de nacionales.
Podría enumerar algunas otras razones para hacer lo imposible por mantener la dolarización en Ecuador, pero, me voy a referir sola a una. La imposibilidad de imprimir dinero sin respaldo de la economía real. La economía real (producción de bienes y servicios) mayor que la economía financiera (flujo de dinero), constituye la reserva, el respaldo de la economía nacional y su funcionamiento. A finales de 1999, el Banco Central del Ecuador ya no podía sostener la economía y sus operaciones de intervención en el mercado del dinero, no eran efectivas. La impresión de dinero sin respaldo se usaba con frecuencia. El epílogo de esta situación llevó a la crisis financiera y bancaria más severa de la historia y a la implementación de la dolarización como la boya de salvamento de la economía. La sociedad ecuatoriana intuyó el problema y se protegió a su manera, cambiando sucres por dólares en el mercado formal e informal.
Desde que estamos dolarizados nos hemos salvado de las intenciones de algunos gobiernos de echarle mano a la impresión de dinero sin respaldo, como la implementación del dinero electrónico. Esta es la mejor prueba, a mi criterio, de que la dolarización debe mantenerse a cualquier costo, pues evitaría la acción populista irracional, nefasta de los políticos deshonestos.
¿Qué se requiere para seguir operando efectivamente en dolarización?
- Claridad en las finanzas públicas. Que el tamaño del déficit fiscal sea manejable, no insostenible. No pueden seguir con el nivel de $5.000 millones en negativo. Esto en un año se corrige con la eliminación de los subsidios a los combustibles. Se equilibran las cuentas fiscales y de ahí en adelante las posibilidades de maniobra fiscal son mejores y se pueden implementar programas de política social más enfocados.
- El aumento del IVA es indispensable por la evasión informal que existe. No requerimos factura para no pagar el IVA. El SRI debe implementar un sistema de registradores de venta para no autorizar ventas sin IVA.
- El balance de ingresos y gastos debe resolver el tema. Es indispensable gastar menos y se definen los rubros prioritarios a eliminar. Los ingresos son menores y se definen las acciones para incrementar los ingresos. El balance se alcanza con personas sanas buscando soluciones, no con políticos populistas.
- Terminar con el discurso populista de los políticos. Ahora hasta el representante del PSC esgrime a voz en cuello un discurso populista (Políticamente correcto, Ecuavisa, 21.01.2024). Los partidos políticos deben actualizar sus cuadros con gente capaz, que entienda la problemática del país.
- La asamblea está en deuda con el país, obviamente está bien con sus socios, pero el abandono de los vulnerables ha facilitado la escalada de la violencia y de la inserción de los jóvenes en las bandas de delincuentes y narcotráfico. Su corresponsabilidad es directa.
El país no es de 18 meses, es de las generaciones futuras. Asambleístas, políticos, funcionarios públicos, por favor piensen en sus nietos y bisnietos. Den ejemplo de honradez, pulcritud de actos y decisión de lograr acuerdos positivos para el país, ellos les agradecerán o les condenarán.