1. Introducción
Hace pocas semanas escuché la presentación del distinguido académico chileno, José Joaquín Brunner, en el marco de un evento previo a la Tercera Conferencia Mundial de Educación Superior, a celebrarse en Barcelona en mayo de 2022. Brunner se enfocó en los nuevos contextos en que se desenvuelven las Instituciones de Educación Superior (IES) en América Latina y el Caribe, señalando que tales contextos han sido generados por el propio sector y las políticas que sobre el tema han impactado la gobernanza en la región, transformándola significativamente a nivel institucional.
Son seis los contextos a los que se refiere Brunner: 1) masificación, 2) universalización y 3) diversificación de la educación superior; 4) resultados de graduados; 5) investigación y producción de conocimientos; y 6) internacionalización.
2. Los contextos
El distinguido profesor señaló que la matrícula universitaria sigue creciendo a nivel mundial, pasando de la educación elitista de la década de los 60 a la masificación rápida de los cuatro últimos años, para alcanzar la universalización, con una tasa bruta de participación por arriba del 50%.
En cuanto a la diversificación de las instituciones de educación superior, Brunner explicó que, sobre la base de un estudio de su autoría en 2016, en América Latina existen 1328 universidades estatales y 2753 privadas. Sin embargo, las instituciones no universitarias estatales y privadas son más de 6500. En el caso del Ecuador, según las estadísticas por él presentadas, habría 33 universidades estatales y 26 privadas; las no universitarias serían 143 y las privadas, 133. Otro aspecto de esta diversificación se ve expresado en temas tales como: historias fundacionales, misiones, cuerpos académicos, tipo de estudiantes, relación con la comunidad, financiamiento, entre otros, lo cual refleja que nos encontramos ante sistemas muy complejos.
Según Brunner, actualmente son cerca de cuatro millones de jóvenes y adultos los que se gradúan al año, considerando carreras universitarias, técnicas y maestrías, entre otras, dependiendo del tamaño del país, la eficiencia del sistema, la arquitectura profesionalizante, el desafío de la retención y graduación oportuna, y la empleabilidad.
A pesar de que la investigación y producción de conocimientos a nivel mundial es periférica y concentrada en pocas universidades y países, con escaso número de investigadores y escaso gasto en proporción al P.I.B., Brunner anota que hay en América Latina una dinámica de crecimiento. Según el número de publicaciones en Scopus, al 2000 se registraba menos de 100 000 investigaciones; al 2019 subió al doble y continúa en buen ritmo.
Respecto a la internacionalización, solo el 5% de instituciones de educación superior aparecen en el ranking 2016 de inserción global mundial (World Economic Forum, 2016) que enlista 980 universidades (140 de Estados Unidos, 26 de Canadá, y un gran número en Europa y Asia); entre ellas se destaca Brasil, Chile y México como países de América Latina a la vanguardia[1].
3. Características de la nueva gobernanza del sistema de educación superior
Comentó Brunner que, en primer lugar, son los cambios de contextos ya citados y la producción de conocimiento, recursos humanos e internacionalización por los que se define la nueva gobernanza. Pero también, por el juego estratégico de las partes interesadas (internas y externas a los sistemas), dentro del entorno político-institucional propio de cada país, y de igual manera, por las ideas, modelos o paradigmas que, sobre gobernanza, circulan internacionalmente, y se reciben, procesan y aplican en la región:
- Organismos internacionales como UNESCO, OECD, BM, IESALC y otros.
- Literatura académica de las IES, policiy oriented, que se refieren al sistema y nivel de educación superior.
- Redes técnico-intelectuales, catedráticos ‘glonacales’ de las propias universidades.
4. Dinámicas de la gobernanza: nivel sistema, nivel instituciones
- A nivel de sistema, la gobernanza enfrenta el continuo desafío de mantener y desarrollar la educación superior y la coordinación sistémica, integrando combinar:
- La intervención político-burocrática (Estado).
- La presencia de las organizaciones (el ‘poder’ de las universidades).
- La competencia entre ellas (mercado y cuasi mercados) junto a la confianza que se deposite en las IES por parte de la sociedad civil y la opinión pública, sectores que las sienten como ‘sus’ instituciones.
- Instituciones: el gobierno de cada una busca adaptarse a la gobernanza sistémica, a las cambiantes configuraciones de la gobernanza del sistema dentro de las condiciones propias de cada IES: tipo jurídico, trayectoria, tamaño, personal, organización interna, estructura de autoridades y jerarquías, cultura interna de país, cultura organizacional, liderazgos, etc.
5. Dimensiones y tendencias de la gobernanza sistémica
Fuente: J.J. Brunner. Gobernanza de la educación superior. UNESCO-IESALC, 2021.
6. Impacto de la gobernanza sistémica en gobiernos de las IES. Tendencias.
- Racionalización en todos los planos de su funcionamiento para adaptarse a la gobernanza sistémica.
- Reformas del gobierno: dirección estratégica (partes interesadas externas); rectoría y sus equipos; consejos académicos; designación de autoridades.
- Planificación estratégica para la competencia nacional e internacional.
(importancia de los rankings).
- Compromisos de desempeño de unidades e individuos.
- Evaluación del desempeño, la producción y la productividad (imperio de los indicadores y la contabilidad).
- Optimización en el uso del tiempo y recursos para subsistir, y generar margen de mejoramiento e innovación.
- Creación de un estamento superior e intermedio de profesionales para el management.
- Tensiones de poder entre estamentos nuevos y antiguos, y con la cultura académica.
Comentarios finales
Está claro para Brunner que ha surgido un nuevo poder burocrático-tecnocrático que profesionaliza la gestión, racionalizando la gobernanza en algunos temas, tales como: competencia, ranking, uso de nuevos instrumentos, convenios y evaluación de desempeño interno, entre otras, para mejorar su posicionamiento. Se trata de lo que él ha optado por denominar el managerialismo, que hace un uso extensivo de indicadores para medir la producción y que está también ligada a la open science, debate que recién inicia en América Latina.
En pocas palabras, con la nueva gobernanza sistémica e interna, menciona Brunner, entran en juego la autonomía y el futuro de las IES, con la exigencia de producir su máxima racionalización, y generando tensión entre la formación propiamente dicha y la generación de conocimientos. Un proceso que se desarrolla entre una nueva arquitectura de grados y títulos, en respuesta a la demanda de los jóvenes que requieren competencias generales transferibles, y la flexibilidad del mercado y la tecnología.
Referencias
Brunner, J.J. (15 de diciembre 2021). Gobernanza de la educación superior. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=XHuH7-OQlRM
World Economic Forum (2016). How the world’s top universities are distributed. Recuperado de https://www.weforum.org/agenda/2016/10/top-universities-distributed-world-map/
[1] Me interesó conocer más del listado y hallé que 79 países están representados. El dominio de las universidades norteamericanas en el ranking es claro. En 2016, 148 de ellas se ubicaron en el ranking y 63 entre las primeras 200. No obstante, en el mismo año, la Universidad de Oxford logró, por primera vez, situarse en el top a nivel mundial.
A nivel de Europa, Reino Unido es el país con mayor número de instituciones en el ranking (91) y más de una en el top 10. Otro país que ubica una de sus universidades en el top 10 con el noveno puesto es Suiza, con nueve universidades en la lista. Alemania, Italia, Francia y España suman 26 universidades del ranking, pero la región que va en ascenso es Asia.
Asia cuenta con 289 instituciones de 24 países en la lista, 19 de las cuales se ubican en los primeros 200 lugares: la Universidad Nacional de Singapur ocupó el puesto 24 y la Universidad de Pekín el 29. Japón es el país más representativo, con 69 universidades en el ranking, de las cuales, la Universidad de Tokio aparece en el puesto 39. En el caso de Honk Kong, mantiene cinco de sus universidades entre las primeras 200.
Además de Estados Unidos (63 instituciones) y Reino Unido (32), Alemania (22) y Países Bajos (13) son los países con más universidades de élite.