La cuarentena, el distanciamiento social y el temor al covid-19 potenciaron el desarrollo del comercio electrónico en Ecuador. Esta modalidad, que ha venido Los consumidores se han inclinado por las compras por Internet, para evitar salir de casa y exponerse a contraer el virus.
La mayoría de los cantones del país se encuentran en semáforo amarillo, lo que ha permitido más actividades fuera de casa, entre ellas la reapertura de algunos negocios. Sin embargo, el miedo del contagio al virus está presente en casi todas las personas, es por esta razón que las compras en línea van a seguir ganando terreno en Ecuador.
Según estudios realizados por la Universidad Espíritu Santo, el comercio electrónico en el Ecuador ha movido 1 286 millones de dólares aproximadamente, desde 2017 hasta la fecha, principalmente en artículos de belleza, ropa y zapatos en especial para mujeres y los hombres tiene una tendencia en comprar computadores o artefactos electrónicos.
Desde el 2019 la Asamblea aprobó un código de comercio en donde ya se definía el comercio electrónico como un proceso de producción, distribución, comercialización y transferencia de bienes y servicios por medios electrónicos.
Actualmente, la implementación de esta modalidad va a depender de la innovación la tecnología y el valor agregado que le quieran dar las empresas, ahora es el momento adecuado ya que genera menores gastos que un comercio tradicional reduciendo gastos innecesarios. Es una buena alternativa para las empresas, debido a que es la única oportunidad de continuar con sus negocios. Bajo esta modalidad de negocio, salir del confinamiento no significará dejar de lado esta modalidad, sino que la potenciaran.
Así mismo, aún existe una resistencia al comercio electrónico por el temor a ser estafados o a que su transacción no se llegue a culminar. Es por eso que el Gobierno se preocupó en regular todo lo relacionado al comercio electrónico, ahora mismo ya se cuenta con un código que regula los negocios en internet y brinda seguridad al consumidor.
Esta modalidad de comercio está enfocada en la generación Z y todas las nuevas generaciones en las que ha tomado fuerza; sin embargo, se ha visto resistencia por parte de generaciones antiguas, es muy complicado en ellos poder generar este hábito de compra, no están acostumbrados al uso de las aplicaciones de compra y prefieren el comercio tradicional.
Está modalidad ha contribuido a realizar transacciones en cualquier parte del mundo, la globalización ofrece a las empresas la superación de barreras y el comercio en línea ha abierto posibilidades para los negocios que han visto oportunidad de expandirse al extranjero sin necesidad de una ubicación física en el mercado al que quieren ir. En varios países del mundo, no ha sido necesario tener una pandemia para recurrir al comercio electrónico. En Europa o Estados Unidos existen empresas que solamente funcionan gracias a la venta online y tienen ingresos bastante grandes, tal es el caso de Amazon, Alibaba en Ecuador, los esfuerzos para sumarse a la tendencia del ‘e-commerce’ lleva varios años y en esta época varias empresas se unen a esta modalidad como las cadenas Almacenes Boyaca, Comecial Kiwi que empieza a ofrecer sus productos a través de plataformas digitales en medio de la emergencia sanitaria, y otras empresas que refuerzan sus negocios dentro de este modelo de negocios en especial el sector textil y artículos de belleza.
El marketing experiencial seguirá siendo relevante, pero ahora, posiblemente tendrá protagonismo el formato híbrido, en el que se ofrecen experiencias que mezclan lo presencial con lo tele-presencial.
A través de esta modalidad se hace posible ofrecer sus productos o servicios sin necesidad de pagar el alquiler de un lugar físico, de contar con varios empleados o invertir un gasto fuerte en activos dentro de la empresa. Las empresa con el apoyo del gobierno se ven obligadas a innovar y educar al consumidor.
Un ejemplo del ‘e-commerce’ son las plataformas digitales de delivery o entrega a domicilio. Los repartidores de estos negocios se han convertido en actores de comercialización claves para el giro de modalidad de los negocios. Como lo ha hecho la empresa TIPTI.S.A en Ecuador una empresa de e-Commerce orientada a la venta de productos de supermercados y tiendas especializadas a través de medios digitales y con entrega a domicilio con cerca de 150.000 usuarios en estos últimos meses.
La pandemia ha obligado a la mayoría de las personas a familiarizarse con la tecnología para continuar con sus actividades laborales, académicas y sociales. Es una buena oportunidad para fortalecer el comercio electrónico y apuntar hacia los sectores prioritarios, alimentación, insumos médicos, farmacológicos, higiene, bioseguridad, entretenimiento, entre otras.
Las redes sociales son una herramienta bastante útil para incursionar en el comercio electrónico, permiten ofrecer los productos o servicios a una mayor cantidad de personas. A pesar de las limitaciones todos estos sectores deberían focalizarse en implementar este modelo de negocio en línea a través de una página web para ofrecer sus productos. Las alianzas y asociaciones son muy importantes para ofrecer productos en línea, alianzas entre firmas de ‘retail’ y otros negocios con portales de comercio electrónico incluso dentro del sector agrícola se podría manejar este modelo, es el momento preciso para capacitar a comerciantes y consumidores sobre esta nueva modalidad de comercio electrónico con el fin de que puedan incursionar dentro del mismo.
Mientras continúe la etapa de confinamiento los consumidores tendrán que poco a poco perder el temor de comprar en línea, es posible que después de la pandemia varias empresas mantengan sus actividades productivas con esta modalidad, esta es una oportunidad para que empresarios y pequeños emprendedores conozcan su capacidad para desenvolverse en este campo. Sin embargo, en nuestro país por varios factores culturales, es bastante probable que se retomen las actividades del comercio tradicional, esto no está mal, el consumidor podrá elegir la modalidad de compra que mejor le convenga.
Finalmente, frente a la coyuntura actual es importante ser creativos, buscar nuevas oportunidades, estar a la expectativa de cuáles son las necesidades que ahora mismo se requiere para ofrecer una diversidad de productos y servicios. Esta situación dejará una gran lección a las empresas, tienen que adaptarse al entorno en el que se encuentran, identificar su segmento de mercado para poder sobrevivir dentro de cualquier dificultad, apuntar a los sectores que tienen más demanda a través del conocimiento, tecnología e innovación.