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Las reformas a la LOC abren un espacio para la voz de la academia

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Actualmente contamos con el Informe para el Primer Debate del Proyecto de Ley Orgánica Reformatoria de la Ley Orgánica de Comunicación, aprobado por la Comisión Especializada Permanente de los Derechos Colectivos, Comunitarios y la Interculturalidad. En la construcción del informe, la Comisión de la Asamblea Nacional, recibió los comentarios en distintos sectores de la sociedad, entre éstos de la academia, que realizó sugerencias que han sido incluidas en las reformas.

Nos interesa, fundamentalmente, que los procesos de investigación en comunicación social y áreas afines, sean desarrollados de forma articulada con las instituciones de educación superior del país, de esta manera, al cooperar, habrá pertinencia en la discusión de las respuestas a los problemas de generación y consumo de mensajes y de servicios de comunicación.

Dentro de la reforma se plantea incluir a un representante de las universidades del país en el Consejo de Regulación, Desarrollo y Promoción de la Información y Comunicación. Personalmente, considero acertado que esto haya ocurrido porque ahora las instituciones académicas del Ecuador serán vistas en primera instancia para llevar adelante los procesos educativos y de investigación que ejecutará el Consejo de Regulación.

Ahora bien, desde la academia, considero que esta vez, se motiva a que exista una mejor articulación de las Escuelas y Facultades de Comunicación del Ecuador. El que se haya dejado un espacio para un miembro de la academia en el Consejo de Regulación de la Comunicación exige coordinar los procesos en los que hemos trabajado, por ejemplo, en la implementación de los rediseños de las carreras, la innovación y la vinculación con la sociedad. Ésta propuesta anima a que haya un trabajo armonizado de los actores que forman a los comunicadores en el país.

Las reformas a la Ley Orgánica de Comunicación (LOC) avanzan en garantizar los derechos a la comunicación como las libertades de expresión y de información porque consideran estándares internacionales, ello derivará en mejores prácticas en el tratamiento de la información. Las tesis de los organismos internacionales no tienen un carácter mandatorio, lo que hacen es aportar criterios para mejorar las prácticas periodísticas y orientan a los ciudadanos. El espíritu de la reforma es acoplarse a los estándares internacionales y motivar la democratización de la comunicación.

Las reformas a la LOC cubren un universo amplio; sin embargo, no hay que olvidar otros espacios de comunicación. La LOC está pensada para los medios tradicionales, pero, ¿Qué pasa con la nueva comunicación a través de los medios digitales?, es decir, ¿Las normativas de comunicación on line y off line deben ser diferentes? Los ciudadanos debemos contar con garantías para proteger los derechos de niños, niñas y adolescentes, evitar la publicidad engañosa y promover espacios para la producción audiovisual nacional. Se deberían fomentar espacios de comunicación digital que atiendan los derechos de los ciudadanos.

Otros elementos que deberían ser considerados en futuros debates pasan por buscar respuestas a ¿Cómo proponer estándares de regulación equitativos tanto a pequeños emprendimientos, realizados por jóvenes en la Internet, como a grandes operadores OTT? Todos necesitan seguir políticas de regulación equitativas. Son temas que aún no se tratan en el Ecuador, pero ya ocurren en países vecinos.

Vale recordar que la penetración de Internet en Ecuador crece, cada año hay más dispositivos inteligentes con la consecuente masificación de los consumos de contenidos digitales, por lo que es necesario garantizar el libre tránsito por Internet, pero también la sujeción a regulaciones mínimas que protejan derechos de los débiles y procuren condiciones de equidad para los creadores audiovisuales de Ecuador. La implementación de garantías le corresponde al futuro Consejo de Regulación, Desarrollo y Promoción de la Información y Comunicación. También quedará pendiente la construcción del reglamento que es dónde se podrá permitir que los ciudadanos gocen de un ejercicio amplio de los derechos a la comunicación.

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