Un estudio publicado por la Universidad de Barcelona y replicado por la revista Cognitive Aging demuestra que las personas bilingües o multilingües presentan una menor tasa de envejecimiento cognitivo en comparación con quienes hablan un solo idioma. La constante estimulación mental que supone cambiar de lengua refuerza las conexiones neuronales y mantiene activo el sistema de atención y memoria.
Los investigadores señalan que hablar varios idiomas también mejora la empatía, la flexibilidad social y la capacidad de adaptación, factores clave para la salud emocional. “El cerebro bilingüe se ejercita continuamente; cambia de código, inhibe interferencias y reorganiza información, lo que funciona como una gimnasia mental diaria”, explica la neuropsicóloga española María Gascón.
El beneficio va más allá del cerebro: las personas multilingües muestran mayor curiosidad, vida social más rica y mejor manejo del estrés. En países con alta diversidad lingüística, estas ventajas son evidentes desde etapas tempranas de la educación.
Relevancia para Ecuador:
El hallazgo refuerza la importancia de fomentar la educación bilingüe y el aprendizaje de idiomas extranjeros e indígenas. En un país plurinacional, el multilingüismo puede ser también una herramienta de integración y envejecimiento saludable.
Imagen de portada: Personas de diferentes edades y culturas conversan animadamente en un ambiente cálido y luminoso.
Crédito: Imagen generada por IA para Dialoguemos.ec

