El riesgo país de Ecuador cerró este jueves en 781 puntos, alcanzando su nivel más bajo en más de tres años. Según datos del Banco Central, el indicador se redujo en 1.127 puntos desde abril, una caída que los analistas atribuyen a las recientes reformas económicas y al ajuste fiscal impulsado por el Gobierno.
La eliminación gradual de subsidios a los combustibles y la actualización en la fórmula para calcular los precios de los derivados fueron medidas que enviaron señales positivas a los inversionistas internacionales. Estas acciones se interpretan como un compromiso con la sostenibilidad fiscal y han contribuido a mejorar la percepción del riesgo soberano del país.
Aun así, Ecuador mantiene uno de los indicadores más altos de la región, superado solo por economías en crisis como Argentina, Bolivia y Venezuela. Los expertos advierten que para consolidar esta tendencia, el país debe alcanzar niveles cercanos a 500 o 550 puntos, lo que implicará mantener la disciplina fiscal, garantizar estabilidad política y profundizar reformas estructurales.
Relevancia para Ecuador:
La mejora del riesgo país podría traducirse en menores tasas de interés para acceder a financiamiento externo, mayor inversión extranjera y mejores condiciones para el comercio internacional. Sin embargo, la estabilidad de este indicador depende de que el Gobierno sostenga políticas responsables y de que no se produzcan retrocesos por factores políticos internos o shocks externos.
Un deterioro repentino podría revertir los avances y encarecer el acceso al crédito, afectando proyectos de inversión pública y privada. Por ello, mantener la confianza de los mercados será clave para aprovechar este momento favorable y apuntalar el crecimiento económico.