Ecuador se posiciona entre los seis países con el mayor incremento en los costos de atención médica en 2025, según el informe WTW Global Medical Trends Survey. El estudio indica que el país experimenta un aumento del 11% en estos gastos, superando a naciones como Chile (5,6%) y Perú (8%).
Este incremento ha generado preocupación entre las familias ecuatorianas, especialmente aquellas de clase media y baja. Por ejemplo, una familia con ingresos mensuales de $1.200 destinaba en 2022 aproximadamente $240 al mes en salud; ahora, en 2025, ese gasto ha subido a $320,64, representando un aumento acumulado del 33% en tres años.
Las causas de este alza incluyen la dependencia del sistema privado de salud debido a las deficiencias del sistema público, la importación de insumos médicos costosos, el crecimiento de enfermedades crónicas como diabetes e hipertensión, y la falta de inversión en infraestructura pública.
La economista Andrea Mendoza señala que este escenario obliga a muchas familias a recortar gastos en educación, ahorro o recreación para cubrir los costos de salud, lo que podría tener consecuencias a largo plazo en el bienestar general de la población.
Ante esta situación, expertos en salud pública instan al gobierno ecuatoriano a implementar políticas que fortalezcan el sistema de salud pública, promuevan la producción nacional de insumos médicos y mejoren la atención primaria para reducir la carga económica sobre las familias.
Mientras tanto, las familias ecuatorianas continúan enfrentando desafíos financieros para acceder a servicios de salud esenciales, lo que resalta la necesidad urgente de reformas estructurales en el sector sanitario del país.