Una disputa se inició la noche del jueves 6 de marzo de 2025 entre la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) y el Municipio de Guayaquil.
Aquiles Alvarez denunció la clausura
La noche del 6 de marzo, el alcalde de Guayaquil, Aquiles Alvarez, denunció en sus redes sociales que el Arcsa clausuró el restaurante La Fogata, de propiedad de su familia.
Agregó que la clausura se dio debido a dos cucarachas que habrían encontrado los inspectores pero que, según Alvarez, no existen.
Recalcó que no hay ninguna prueba de la presencia de las cucarachas en el local. Tachó el acto como una “persecución del Gobierno”.
El Alcalde de Guayaquil dice en su publicación que el personal del Arcsa también fue a otros tres locales de pizzería en Ciudad Celeste, Urdesa y Arcos Plaza.
Añadió: “La verdad es que están muy enfermos… tienen el alma podrida y el cerebro también. Cero Dios en su corazón”.
“Clausuren no más, al final, una raya más al tigre”, agregó y adjuntó un video en donde se ve a los inspectores del Arcsa cumpliendo el procedimiento de la clausura.
En las imágenes, un empleado de la pizzería señala que mostró al personal del Arcsa en el local un video de la fumigación días antes.
Sigue la persecución del gobierno, clausuran el restaurante La Fogata, propiedad de la familia, por supuestamente dos cucarachas que no existen. (Sin pruebas).
Ya fueron a Ciudad Celeste, al local de Pizza Libre, otro grupo del ARCA está en pizza Libre de Urdesa y otro en el… pic.twitter.com/pd4ptXWEpb
— Aquiles Alvarez Henriques (@aquilesalvarez) March 7, 2025
Municipio de Guayaquil cierra oficinas de Arcsa
Más tarde, en la noche del jueves 6 de marzo, guardias de la Arcsa fueron desalojados por personal del Municipio de Guayaquil, comentó la gobernadora del Guayas, Zaida Rovira.
La Gobernadora acudió al Parque Samanes para determinar las causas del cierre de las instalaciones de la Agencia.
El personal de Arcsa fue desalojado pasadas las 21:00 de las oficinas.
La Gobernadora del Guayas dio declaraciones y señaló que acudió al Parque para verificar lo que estaba ocurriendo.
Agregó que si hoy no se abrían las oficinas se trataría de una paralización de un servicio público y que Arcsa maneja información sensible.
Y que le preocupa que una dependencia pública del Estado esté en manos de no se sabe quién ni se sabe lo que pretende.
Texto El Comercio