Cinco organizaciones políticas son las damnificadas de las elecciones legislativas del pasado domingo 9 de febrero de 2025. El movimiento oficialista Acción Democrática Nacional (ADN) y la Revolución Ciudadana (RC5) eliminaron a los partidos y movimientos que en las elecciones de agosto de 2023, tras la muerte cruzada, lograron representación parlamentaria.
El movimiento Construye es el más afectado. Pasó, de ser la segunda fuerza política en el Parlamento, cuando consiguió 29 asambleístas, a uno, en la provincia de Imbabura.
El Partido Social Cristiano (PSC), de 19 legisladores cayó a cinco. Consiguió un representante nacional y cuatro provinciales. El movimiento suma de cuatro legisladores a cero.
Avanza tuvo tres parlamentarios y ahora 0. El Partido Sociedad Patriótica (PSP) de dos asambleístas a 0. La Unidad Popular (UP) mantiene la misma representación, un asambleísta.
Este cambio del mapa legislativo arrancó con las deserciones y camisetazos entre 2023 y 2024, el movimiento oficialista acción democrática nacional, que llegó con 14 asambleístas y sumó 20 entre socialcristianos, correístas, construye e independientes.
Partidos históricos, como el Socialista, la Izquierda Democrática (ID) y otros de reciente participación salieron de la elección prácticamente liquidados. Por segunda elección consecutiva, la ID no consiguió un solo parlamentario.
El movimiento CREO, que en 2021 llevó al poder a Guillermo Lasso Mendoza, no consiguió ni una curul. En situación similar quedan el partido Socialista, Democracia Sí, Movimiento Amigo, Pueblo Igualdad y Democracia y Centro Democrático.
Texto original de Ecuavisa