El presidente ruso, Vladímir Putin, defendió hoy las restricciones impuestas por el regulador de las comunicaciones Roscomnadzor a YouTube y Google, y llamó a estas plataformas a respetar las leyes de Rusia.
«YouTube y Google deben respetar nuestras leyes, deben distanciarse de las estafas en las redes, y en particular no deben aprovecharse y abusar de la red para cumplir los objetivos de sus Gobiernos», dijo en su rueda de prensa anual.
El mandatario ruso señaló que las personas acuden a los buscadores para hallar informaciones de música y cultura, pero en lugar de ello «aparecen contenidos que no tienen relación alguna ni con la cultura ni con la música y son propaganda de determinadas plataformas políticas».
También acusó a las plataformas occidentales de «prácticamente retirar los nombres de nuestros artistas, blogueros, políticos».
«Todo esto es una violación de las leyes de Rusia. Por ello deben elegir: o respetan nuestras leyes y entonces podrían verse sometidos a determinadas limitaciones en sus países, o trabajan solo allá. Pero si quieren trabajar aquí, deben hacerlo en correspondencia con las leyes rusas», indicó.
Respecto a YouTube, actualmente ralentizado en Rusia, responsabilizó a la plataforma de esta situación, al señalar que debido a las sanciones impuestas por Occidente por la guerra en Ucrania, Google dejó prácticamente de financiar sus filiales en Rusia y de suministrar el equipamiento necesario para su adecuado funcionamiento en territorio ruso.
«De este modo se creó problemas adicionales a sí mismo», zanjó.
Este jueves el portal independiente ruso Mediazona constató, en base a datos de Google, que desde comienzos de diciembre tiene lugar una nueva caída considerable del tráfico de YouTube, la segunda tras el drástico recorte que tuvo lugar en agosto pasado, cuando se redujo al 70 %.
Ahora, según las gráficas presentadas, el tráfico ha caído aproximadamente hasta el 50 % de los niveles medios de la primera mitad de 2024.
Rusia impone periódicamente multas a las principales compañías informáticas occidentales por diversas violaciones de las leyes del país como la negativa a retirar «informaciones falsas» de sus servidores, difundir contenidos prohibidos como pornografía infantil, instrucciones para fabricar explosivos o llamamientos al terrorismo.
En casos como Facebook, declarado «extremista» tras el comienzo de la guerra en Ucrania, o Twitter (actualmente X), las autoridades rusas optaron por bloquear sus servicios en Rusia. EFE