Diego G., exprefecto de Imbabura, entre 2009 y 2014, fue sentenciado a un año de cárcel como autor directo de peculado, informó la Fiscalía General del Estado. La audiencia se realizó en el Complejo Judicial Norte, ubicado en la zona bancaria y comercial de Quito.
Según las investigaciones del Ministerio Público, la Prefectura de Imbabura contrató a seis personas que, por disposición verbal del exprefecto, se desempeñaron como guardias de seguridad en su domicilio en Ibarra, la capital de esa provincia. Ellos efectuaban turnos rotativos de ocho horas, las 24 horas, inclusive los feriados.
Es decir, mientras Diego G. cumplía las funciones de Prefecto de Imbabura mantuvo un servicio de guardianía en su vivienda, el cual era cancelado con fondos públicos de la institución a la que representaba. Según las pericias contables, el monto del perjuicio económico es de USD 182.636,11, según la Fiscalía.
49 elementos de convicción presentó la Fiscalía General para sustentar el dictamen acusatorio. Entre los principales constan el informe de la Contraloría que determinó las irregularidades en la contratación del personal. También las versiones de seis guardias de seguridad y de funcionarios del Gobierno Provincial.
También constan los roles de pagos de las remuneraciones mensuales y beneficios de ley, un informe de la Unidad de Análisis Financiero y Económico (UAFE), oficios, documentos e informes de pericias contables y financieras.
Texto original de Ecuavisa