El presidente ruso Vladímir Putin llegó el martes a Corea del Norte luego de haber dicho que los dos países deben cooperar estrechamente para enfrentar las sanciones internacionales en medio de crecientes confrontaciones con Washington.
Putin fue recibido en el aeropuerto de Pyongyang por el dictador norcoreano Kim Jong Un, reportaron las agencias RIA-Novosti e Interfax.
El avión presidencial aterrizó en torno a las 02.45 hora local (17.45 GMT) en el Aeropuerto Internacional de Sunan, donde Putin fue recibido personalmente por Kim, con el que se había reunido en septiembre pasado en territorio ruso.
Kim, vestido de riguroso negro, esperó a Putin prácticamente al pie de la escalerilla, tras lo que ambos se fundieron en un abrazo y una mujer ataviada con vestimenta tradicional coreana le entregó al líder ruso un ramo de flores rojas.
Seguidamente, ambos avanzaron sobre una alfombra roja y revistaron una guardia de honor integrada por efectivos de los tres ejércitos de Corea del Norte y Putin saludó a algunos de los presentes.
Los mandatarios departieron durante unos minutos antes de acceder al coche oficial, un Aurus ruso, al que Putin invitó a subir a su colega norcoreano.
En el vídeo divulgado por el Kremlin se puede ver cómo la comitiva oficial avanza hacia Pionyang escoltada por policías en moto.
El aeropuerto estaba engalanado con banderas de Rusia, retratos de Putin y frases de bienvenida en ruso como “Saludamos calurosamente al presidente de la Federación Rusa, el camarada Vladímir Putin”.
Putin se aloja esta noche en el lujoso Palacio de Invitados de Kumsusan, construido en 2019 y que albergó al líder chino, Xi Jinping, cuando visitó hace un lustro Corea del Norte.
Anteriormente, en un artículo de opinión, Putin agradeció a Corea del Norte por apoyar sus acciones en Ucrania y dijo que sus países cooperarán estrechamente para superar las sanciones.
Los comentarios de Putin aparecieron en un artículo de opinión en los medios estatales norcoreanos horas antes de su visita de dos días, mientras los países profundizan su alineación frente a confrontaciones separadas y cada vez más intensas con Washington.
En Pyongyang, la capital norcoreana, las calles estaban decoradas con retratos de Putin y banderas rusas. Una pancarta colgada en un edificio decía: “Damos una calurosa bienvenida al Presidente de la Federación Rusa”.
Putin, en su primer viaje a Corea del Norte en 24 años, dijo que aprecia mucho su firme apoyo a su acción militar en Ucrania. Indicó que los países continuarían “oponiéndose resueltamente” a lo que describió como ambiciones occidentales “de obstaculizar el establecimiento de un orden mundial multipolar basado en la justicia, el respeto mutuo por la soberanía y la consideración de los intereses de cada uno”.
Rusia lanzó la guerra en Ucrania en 2022.
Putin también dijo que Rusia y Corea del Norte desarrollarán sistemas comerciales y de pago “que no estén controlados por Occidente” y se opondrán conjuntamente a las sanciones que describió como “restricciones ilegales y unilaterales”.
Norcorea está bajo fuertes sanciones económicas del Consejo de Seguridad de la ONU por sus programas de armas nucleares y misiles, mientras que Rusia también está lidiando con sanciones de Estados Unidos y sus socios occidentales por su agresión en Ucrania.
Putin dijo que los países también ampliarán la cooperación en turismo, cultura y educación.
Por su parte, John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, dijo que la relación cada vez más profunda entre Moscú y Pyongyang es preocupante, “no sólo por los impactos que tendrá sobre el pueblo ucraniano, porque sabemos que los misiles balísticos norcoreanos todavía se utilizan para atacar objetivos ucranianos, sino porque podría haber cierta reciprocidad aquí que podría afectar la seguridad en la Península de Corea”. (AP y EFE)