Turquía dijo el jueves que suspendería todo comercio con Israel hasta que permita que la ayuda ingrese a Gaza sin obstáculos durante su ofensiva contra los terroristas de Hamas en el territorio.
“Las exportaciones e importaciones hacia y desde Israel han sido suspendidas”, dijo el Ministerio de Comercio en un comunicado, añadiendo: “Turquía aplicará estas nuevas medidas… hasta que el gobierno israelí autorice un flujo ininterrumpido de ayuda humanitaria a Gaza”.
El 9 de abril, Turquía había anunciado que restringiría las exportaciones a Israel en 54 grupos de productos -entre ellos el acero, materiales construcción y eléctricos, maquinaria de distinto tipo o fertilizantes y algunos químicos- en respuesta a la negativa israelí para que Ankara lance desde el aire ayuda humanitaria a Gaza.
Según informó en ese momento el Ministerio de Comercio turco en un comunicado, las restricciones permanecerían en vigor “hasta que Israel (…) declare un alto el fuego inmediato en Gaza y permita un flujo suficiente e ininterrumpido de ayuda humanitaria” a la Franja.
El ministro de Exteriores turco, Hakan Fidan, también afirmó esta semana que Ankara intervendrá en el caso abierto por Sudáfrica contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) por su ofensiva en la Franja de Gaza.
“Con este paso, esperamos que el proceso ante la Corte Internacional de Justicia avance en la dirección correcta”, ha señalado este miércoles durante una rueda de prensa junto a la ministra de Exteriores de Indonesia, Retno Marsudi, según ha recogido la agencia de noticias Anatolia.
La CIJ instó a finales de enero a las autoridades de Israel a adoptar “todas las medidas posibles” para proteger a la población palestina de la Franja de Gaza y facilitar la entrada de ayuda para evitar la comisión de un genocidio, si bien la situación no ha mejorado sobre el terreno.
El Ministerio de Exteriores de Israel ha descrito al Gobierno sudafricano como el “brazo legal de Hamas”. “Trabaja en pro de los intereses de esta organización terrorista que opera entre la población civil de la Franja de Gaza”, indicó a mediados de febrero.
La situación entre Israel y la CPI se ha vuelto cada vez más tensa, con crecientes preocupaciones de que la corte emita órdenes de arresto contra líderes militares y políticos israelíes de alto rango por presuntos crímenes de guerra cometidos en Gaza. Según informes, el primer ministro Benjamin Netanyahu podría estar entre los principales objetivos.
Esta perspectiva ha generado una fuerte reacción de las autoridades israelíes, quienes califican la posibilidad de tener a sus líderes en la lista de personas buscadas por la CPI como “un ultraje de proporciones históricas”. Netanyahu acusa abiertamente a la corte de intentar paralizar la capacidad de Israel para defenderse.
Según informó la BBC, los comentarios públicos del primer ministro sugieren que se podría estar discutiendo sobre esto. La CPI no ha confirmado las afirmaciones israelíes. No obstante, el fiscal jefe Karim Khan envió un mensaje contundente durante su visita a la región en diciembre pasado. Khan recorrió los sitios de los ataques perpetrados por el grupo terrorista Hamas en aldeas israelíes cerca de Gaza y se reunió con líderes políticos y familias de víctimas palestinas.
En ese momento, Khan condenó la violencia sufrida por civiles en ambos bandos y prometió investigar, advirtiendo: “Si no cumplen con el derecho internacional humanitario, no se quejen cuando mi oficina se vea obligada a actuar”.
La CPI ha estado investigando las acciones de Israel durante los últimos tres años, y más recientemente también las de Hamas. Tiene la potestad de acusar y juzgar a individuos por los crímenes más graves bajo el derecho internacional. Anteriormente, ha emitido órdenes de arresto contra líderes como Vladimir Putin, Muammar Gaddafi y Joseph Kony.
(Con información de AFP, EP y EFE)
Texto original de Infobae