Naciones Unidas (EFE).- La ONU dijo que está trabajando con el Gobierno interino de los talibanes en Afganistán para asistir a la población tras las fuertes inundaciones que han provocado al menos 300 muertos y dejado a miles de personas sin refugio ni recursos al norte del país.
“La ONU y sus socios en Afganistán se están coordinando con las autoridades de facto para evaluar las necesidades y suministrar asistencia de emergencia rápidamente, dijo en un breve comunicado la portavocía del secretario general, António Guterres, que transmitió sus condolencias.
Guterres expresó su tristeza y solidaridad con la población afgana por el desastre causado en las últimas horas por las inundaciones repentinas en la provincia de Baġlān, que el Programa de Alimentos (PMA) cifra en 300, mientras que el Gobierno afgano rebaja a 153 en total en varias provincias.
Asistencia por las inundaciones en Baġlān
El PMA, que está repartiendo alimentos a los supervivientes, indicó que las inundaciones han destruido también 1.000 casas en Baġlān.
El principal portavoz de los fundamentalistas, Zabiullah Mujahid, afirmó en un comunicado que el Gobierno interino ha ordenado movilizar “todos los recursos disponibles para llevar a cabo las operaciones de rescate”.
Afganistán ha sido testigo de fuertes nevadas, intensas lluvias e inundaciones repentinas en las últimas semanas.
El país asiático se considera uno de los más vulnerables del mundo al cambio climático. Además del menos preparado para adaptarse, de acuerdo con un informe de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
A la vulnerable situación se suma la interrupción de buena parte de las ayudas internacionales. La congelación de los fondos del país, después de que los talibanes se hicieron con el poder en agosto de 2021. EFE