El Interamerican Institute for Democracy (IID) organiza el foro “¿Qué podemos hacer por el pueblo de Cuba?”. La cita es este martes a las 11:00, hora del este de Estados Unidos (15:00 GMT), en la sede del IID en Miami y tendrá transmisión en vivo del instituto e Infobae.
El foro contará con la participación de distinguidos expertos y figuras influyentes en el ámbito de la política y los derechos humanos de la región.
El ex ministro de gobierno de Bolivia Carlos Sánchez Berzaín brindará un marco de referencia. Los expositores serán: José Azel, Darcy Borrero, Humberto Díaz Argüelles, Marcell Felipe, Jorge Luis García Pérez “Antúnez”, Orlando Gutiérrez, Sylvia Iriondo, Javier Larrondo, Iliana Lavastida, Luis Leonel León, Mario J. Penton, Diego Suárez, Julio Schilling, Armando Valladares y el músico Raudel Collazo Pedroso. El cierre estará a cargo del ex alcalde de la ciudad de Miami Tomás Regalado.
En diálogo con Infobae, Carlos Sánchez Berzaín manifestó que “está invitada la gente más representativa, instituciones y personas que defienden el retorno de la democracia en Cuba”.
Y detalló: “Por ejemplo, Diego Suárez de la Fundación Cubano-Americana. En la ‘Vieja Guardia’ podemos anotar también a Humberto Díaz Argüelles. Además, hay generaciones más jóvenes, donde tenemos intelectuales como Javier Larrondo, presidente de Prisoners Defenders”.
Jorge Luis García Pérez, más conocido como “Antúnez” y quien fue preso político de la dictadura cubana, también brindará su testimonio. “Además de periodistas, filósofos y otras personalidades. Tenemos un mapa que trata de cubrir todo lo que es la representacion de Cuba en el exilio”, resaltó Sánchez Berzaín.
Consultado sobre los objetivos principales del encuentro, indicó: “Es un foro para ver qué están pensando los principales actores de Cuba en el exilio en un momento en que la dictadura cubana está en un proceso de deterioro que puede ser final. Será una gran puesta en escena de estos actores”.
“Nosotros, desde el Interamerican Institute for Democracy, somos un think tank que recogemos ideas e impresiones para que se unifiquen con vistas a devolverle al pueblo cubano la libertad. Ese es un poco el objetivo de la cita, que estas personas también presenten sus propuestas”, concluyó.
Por su parte, Javier Larrondo, presidente de la ONG Prisoners Defenders, contó a Infobae: “Nos honra especialmente participar como un ponente más, en primer término porque es renombrable el elenco de personalidades y organizaciones que estarán presentes en el mismo. Pero también nos honra porque el evento ha tenido un acierto muy destacable, además, al centrar la atención en lo que se puede hacer por el pueblo de Cuba, indefenso y a merced del terrorismo de un Estado que, cabe desear, ojalá esté pronto a terminarse y acabar con la larga agonía a la que ha sometido durante 65 años a todos los cubanos de dentro y de fuera, al igual que a otros pueblos como el venezolano, el nicaragüense o el boliviano”.
Y continuó: “Es nuestro deseo, como el de todas las organizaciones que participan, que cuando esto eventualmente ocurra, suceda sin que la tragedia agrave aún más la paupérrima situación actualmente creada por ese régimen a todos los niveles imaginables en términos de represión, la primera causa de sus males, pero también la miseria, la separación familiar forzada y, en definitiva, la desesperanza vital. Que estamos con ese pueblo y su bienestar, y que protegeremos en la medida de nuestras posibilidades su transitar a la democracia, y que también haremos lo que esté en nuestra mano para que el tránsito sea de forma pacífica, es un mensaje que todo el exilio de Cuba, y nosotros y otras muchas organizaciones internacionales deseamos poderle transmitir alto y claro a los cubanos. Nos acordamos especialmente ahora de los más de 1.070 prisioneros políticos condenados en Cuba en la actualidad que son torturados, ellos pero igualmente sus familias, y que padecen todo ello sin atención médica y en un estado de desnutrición deplorable. Deseamos que no pierdan la esperanza, estamos todos a su lado”.
Larrondo además enfatizó: “Este mensaje también deben escucharlo igualmente alto y claro los funcionarios sometidos al silencio obligado, al miedo y a la mentira, y que también albergan en su interior, como no, el anhelo de la prosperidad para sus vecinos y compatriotas, al tiempo que, trabajando para el sistema y conociéndolo bien, saben ellos mejor que nadie que eso no será posible sin un cambio real. Sí se puede, pero hay que dar el paso al frente en comunión con la dignidad propia, la del prójimo, y con la fuerza moral de que esta verdad es ya demasiado evidente y dolorosa”.
Por último, reflexionó: “El mensaje, finalmente, esperemos cale en las fuerzas armadas, el último bastión de poder del régimen, donde los pobres reclutas del servicio militar obligatorio imperante en Cuba están sufriendo mucho, y así lo expresan, temiendo la orden de ir al combate contra su propio pueblo, orden que ya han recibido en demasiadas ocasiones en estos tres últimos años. Ya lo decía José Martí: ‘La libertad no puede ser fecunda para los pueblos que tienen la frente manchada de sangre’. Mucho menos lo será jamás cuando la sangre es de un hermano que sólo anhela vivir en prosperidad y respeto a los derechos de todos por igual”.
En marzo, miles de cubanos salieron a las calles de distintas ciudades del país para protestar por los permanentes cortes de luz, la escasez de agua y la falta de alimentos. Todo esto en medio de una crisis que se hace insostenible para sus sufridos habitantes, que ven como día a día su vida cotidiana es más difícil y subsistir parece una misión imposible.
Texto original de Infobae