Andrejus Tokeris es el narco lituano más buscado de ese país y fue detenido el 24 de marzo pasado en Montañita, una playa turística de Ecuador. El arresto sucedió porque el lituano tenía una orden de difusión roja de la Interpol. Conocido como el químico de las drogas sintéticas, Tokeris ha estado involucrado en un extenso historial delictivo, caracterizado por múltiples arrestos, condenas y fugas.
Su trayectoria criminal se remonta a más de una década, cuando comenzó a operar clandestinamente en el mundo del narcotráfico. Junto con su hermano menor, Vitalijus Tokeris, Tokeris ha sido vinculado con la producción y distribución de una amplia gama de drogas, desde éxtasis hasta LSD y anfetaminas. Su habilidad para fabricar estas sustancias ilegales ha sido objeto de atención tanto de las autoridades como de los medios de comunicación, según reportó el medio lituano Delfi.
Tokeris ha sido acusado de la producción a gran escala de drogas en su país de origen y también ha estado involucrado en la distribución de medicamentos fabricados en el extranjero en Lituania. Además, sus habilidades químicas han permitido que opere en un nivel técnico, incluso fabricando drogas directamente en hoteles durante sus estancias en Kaunas, la segunda ciudad lituana más poblada ubicada en el centro del país.
En el 2005, la policía encontró más de 62 mil tabletas de éxtasis, 18,7 mil dosis de LSD, 753 gramos de cannabis, 5,38 gramos de anfetamina, una pequeña cantidad de heroína, según reseñó el medio lituano Lrytas. Esta fue una de las mayores cantidades de drogas encontradas en Lituania en ese momento. El valor de las drogas encontradas en el mercado negro alcanzó los 600 mil euros. La familia de Tokeris también ha sido implicada en los ilícitos de su hijo. Su padre, un famoso cirujano, se vio envuelto en el escándalo cuando se descubrió que su garaje había sido utilizado como almacén para las drogas fabricadas por sus hijos. Aunque el padre de Tokeris logró evitar ser capturado inicialmente al escapar a Holanda, finalmente fue arrestado y condenado por complicidad en los delitos de narcotráfico y contrabando, según recoge Delfi.
Según TV3, “Tokeris aspiraba a convertirse en el jefe más influyente que controlaba el mercado lituano del negocio de las drogas”. Su carrera criminal empezó en los 2000, cuando fue arrestado repetidamente por robos y hurtos. El hombre de Kaunas robaba a los transeúntes en las calles. En 2001, Tokeris fue declarado culpable de robo y en 2003, agentes de la comisaría de policía lo volvieron a arrestar.
En el 2020 admitió abiertamente sus actividades delictivas y ofreció detalles sobre la fabricación de drogas. Según funcionarios de la Policía Criminal de Lituania, Tokeris fue idenficado como uno de los principales proveedores de drogas del país, según TV3. Su país lo requiere para que cumpla una condena de 12 años por cargos relacionados con el narcotráfico.
Su captura en Montañita no sorprende, pues el balneario, conocido por sus fiestas, enfrenta problemas con la venta y consumo de drogas. En el 2021, las autoridades encendieron las alertas tras encontrar en el lugar cocaína rosa, una droga sintética que pertenece a la familia de las fenetilaminas psicodélicas.
Ecuador se ha convertido en el centro de operaciones del narcotráfico en la región. Según la Policía, la ubicación geográfica del país, junto a la baja bancarización y el poco procesamiento de delitos relacionados con el lavado de activos, además de tener como moneda al dólar estadounidense, convierten a Ecuador en un lugar atractivo para los traficantes de drogas a toda escala. Desde las costas del país, ya sea a través de contenedores de exportación contaminados o de lanchas rápidas, submarinos o embarcaciones artesanales, se envía droga hacia Centro y Norteamérica, así como a Europa.
Texto original de Infobae