Tras obtener 91 puntos, en el concurso de méritos y oposición, Mauricio Torres será designado como Contralor General del Estado. El lojano, de 52 años, dirigirá de una institución que lleva seis años de encargo en encargo.
La tarde del 1 de noviembre de 2023, la Comisión de Selección Ciudadana aprobó el informe, en el que se declaró su victoria en el concurso. Ahora, el Pleno del CPCCS debe consagrar su designación. Se espera que esto ocurra a inicios de la siguiente semana.
Finalmente, la Asamblea Nacional que se iniciará sus funciones el 20 de noviembre de 2023 deberá posesionarlo para que empiece a ejercer sus nuevas funciones.
Su perfil
Torres es abogado e ingeniero comercial por la Universidad de Loja. Además, tiene una maestría en ciencias internacionales y un PHD en administración pública.
Su experiencia profesional ha estado ligada, sobre todo, a la función pública y la Contraloría. En 2008 ingresó a esa entidad como capacitador. Actualmente, es supervisor de Investigación, Evaluación y Desarrollo Académico.
Además, es docente en la Universidad Central. Y desde 2019 labora en la Fiscalía General del Estado (FGE), mediante una comisión de servicios, como coordinador de Gestión del Conocimiento.
Su última declaración patrimonial la presentó en 2022. Según este registro, tiene activos por más de USD 388.000 y deudas por USD 350.000. Es decir, su patrimonio asciende a USD 30.000.
En los últimos cinco años, según el Servicio de Rentas Internas (SRI), Torres ha pagado USD 25.344 de impuesto a la renta.
La entrevista
A pocas horas de que se aprobara el informe sobre su victoria, Mauricio Torres respondió unas preguntas a PRIMICIAS.
Un cuestionado concurso
Concluida la recalificación de méritos y oposición, usted tiene más de 90 puntos y es el virtual nuevo Contralor. ¿Cómo evalúa este concurso?
Este concurso ha tenido algunos inconvenientes desde que empezó, aproximadamente, hace dos años. Por ejemplo, las acciones de protección que han paralizado el concurso, y también un cambio de reglamento por orden judicial.
Eso trajo consigo algunos pequeños problemas, especialmente, en la calificación de méritos. Algunos postulantes no cumplieron con el requisito primordial que era el tener el detalle de actividades en su certificado de laboral.
Asimismo, en el examen que se rindió un día sábado y al día siguiente se dieron los resultados, hubo otros inconvenientes. Al ubicarme en primer puesto no querían que se publiquen las calificaciones, incluso se les apagó la luz para que no puedan proclamar resultados oficiales. Inclusive, hubo un intento del secretario para no notificar los resultados por lo cual fue suspendido. Y luego el expresidente del CPCCS (Alembert Vera) que no quiso enviar la terna para elegir secretario para que el concurso pueda continuar. El proceso ha estado matizado por demoras debido a decisiones judiciales. ¿Considera que estas fueron justificadas? Si bien es cierto todos los ciudadanos tenemos derechos, esos derechos constitucionales deben ser reclamados cuando han sido violentados y se lo puede hacer a través de una acción de protección. También es cierto que se han abusado de estas acciones. La mayoría no son justificadas. Por ejemplo, se pedía que se revise nuevamente los méritos, cuando todavía faltaba la etapa de recalificación de méritos.
Usted pidió que se recalifiquen tanto su carpeta cómo su prueba ¿Por qué?
Sí, yo pedí que se recalifique mi carpeta porque no estaba conforme con mi nota. Yo aspiraba que se me califiquen con 50, porque mis méritos eran para 50 y en la primera ocasión me pusieron 45,5, con la recalificación subí a 49. En todo caso ya se hizo justicia y creo que es una puntuación que me merezco.
En la prueba también pedí recalificación por qué hubo dos preguntas en las que tenía ciertas dudas y, buscando en la normativa, se podía interpretar que mi respuesta estaba bien. Sin embargo, no fueron consideradas en la recalificación.
¿Hubo presiones e intereses políticos detrás del concurso?
Presiones o intereses políticos detrás del concurso no podría afirmar. Lo que sí teníamos es un poco de dudas al inicio porque había dos postulantes que decían que eran los preferidos, por tener el apoyo de ciertos partidos políticos.
Cuando revisaron los méritos nos dimos cuenta de que estaban en primer lugar. Y los que aspirábamos a tener más puntaje, pensamos que estábamos siendo perjudicados porque no teníamos el puntaje que merecíamos.
Pero, con la recalificación las cosas se fueron aclarando. Y con el examen las cosas cambiaron y nos volvió la confianza y ahora vemos que en el proceso se actuó con transparencia y sin ninguna presión política.
Mauricio Torres y su plan
¿Cuál es la trayectoria que lo avala para dirigir la Contraloría?
Mi trayectoria en el sector público es de 23 años. Llevo casi 14 años en la Contraloría General del Estado, he sido funcionario de carrera, fui capacitador y luego asumí el puesto de Experto Supervisor.
Me he preparado también a nivel de administración pública, soy Doctor PHd. Además, tengo títulos de ingeniero y de abogado, soy magíster en Ciencias Internacionales. Me he preparado todos estos años para poder dirigir a la Contraloría.
Creo que sé lo que hay que hacer y cómo lo vamos a hacer. Tengo una evaluación de lo que es la Contraloría, he recorrido las 23 provincias más la matriz dando capacitación y en todas ellas he conocido y sé cuáles son debilidades y sus fortalezas.
En líneas generales, ¿cuál es el plan que tiene para su gestión en la Contraloría?
Quiero mejorar el sistema de control interno a través de un verdadero control continuo, en donde se asesore a los servidores públicos para que puedan realizar sus actividades sin ningún temor.
Además, vamos a brindar un asesoramiento para la contratación pública en todo el proceso y evitar así que después tengan errores.
Vamos a implementar la auditoría forense para fortalecer los indicios de responsabilidad penal que muchas veces se llegan a archivar en Fiscalía.
También vamos a profesionalizar al personal de la Contraloría General del Estado a través de capacitaciones y de cursos en el exterior con nuevas innovaciones a nivel de auditoría y tecnología.
¿Será fácil ejecutar este plan cuando en la institución hay funcionarios de administraciones pasadas, en las que se ha comprobado que hubo corrupción y presiones?
En cualquier institución ningún cambio es fácil. Cualquier plan que uno quiera implementar tendrá que ser socializado porque siempre los cambios van a tener resistencia; sin embargo, yo confío en la profesionalización de la mayoría de los servidores que son muy capaces, muy profesionales.
Pero, no hay que descartar que existen también malos elementos. Tengan la certeza de que si es que se llega a comprobar cualquier acto de corrupción, lastimosamente, tendrán que abandonar la institución.
No vamos a permitir actos contra la ley o que dañen la imagen institucional. Será una institución muy transparente y si existen servidores que no quieren estar en la línea de trasparencia no tendrán que estar en la institución.
¿Es factible una depuración en la Contraloría?
Yo más bien diría que es importante mejorar el clima laboral. Se hará una evaluación integral del personal, que nos permita determinar las debilidades, fortalezas y amenazas en talento humano.
Y, luego analizar los servidores que verdaderamente merecen y quieren estar en la Contraloría.
¿Hacen faltan reformas legales y reglamentarias en la Contraloría? ¿Cuáles?
Sí, por eso es necesario trabajar en conjunto con la Asamblea Nacional y con el Ejecutivo. Con el Ejecutivo para obtener los reglamentos que necesitamos a la Ley Orgánica, y con la Función Legislativa con proyectos que mandaremos para reformar la ley.
Sin duda, necesitamos cambios para un nuevo sistema de auditoría gubernamental. Habrá que reformar la ley en el ámbito del sistema de control y algunos aspectos que la globalización trae consigo como la innovación e implementación de nuevos sistemas de control.
¿Está al tanto de la realidad administrativa y presupuestaria de la Contraloría? ¿Hace falta más presupuesto y personal?
El presupuesto general de la Contraloría en estos momentos no es el suficiente. El personal tampoco es el suficiente. Necesitamos mayor presupuesto para crear o para poder sacar adelante los proyectos y propuestas que tenemos.
Sin embargo, estamos conscientes de la realidad del país por eso es importante la comunicación con la Función Ejecutiva y trazar nuestra planificación estratégica para que, de acuerdo a los recursos, podamos ejecutar nuestros proyectos.
Vínculos y conflictos
Usted lleva 14 años en la Contraloría, durante las cuestionadas gestiones de Carlos Pólit y Pablo Celi. ¿Cuál fue su rol en esos años? ¿Era cercano a los excontralores?
No tengo ninguna cercanía o relación con ellos, yo he trabajado siempre en la Dirección de Capacitación. Estuve todos los años capacitando al sector público y al personal de Contraloría. Nunca ocupe un puesto directivo en esos años de gestión por lo que no hay ninguna relación.
Actualmente, usted está en una comisión de servicios de la Fiscalía. ¿Cómo llegó a esta entidad, es cercano a la Fiscal General y esto podría generar conflictos de intereses?
Así es, en la actualidad estoy en comisión de servicios en la Coordinación General de Gestión del Conocimiento. Yo llego, justamente, por una reforma que se hace al estatuto orgánico por procesos de la entidad, donde se implementa esta Coordinación.
En esos días había terminado de estudiar mi PhD en administración pública y había la posibilidad de ayudar a ejecutar la creación de esta Coordinación.
No veo que exista conflicto de intereses, la relación que se tiene con la máxima autoridad de la Fiscalía es exclusivamente laboral.
Con información de Primicias