Son variadas las razones por las que siempre se nos ha instado a mantener una rutina constante de higiene dental. Ejemplos de esto son la eliminación del aliento matutino desagradable o la prevención de la pérdida de dientes con el paso de los años. Sin embargo, resulta sorprendente considerar que existen motivos aún más serios para mantener una higiene bucal rigurosa. Y es que un reciente estudio ha llegado a la conclusión de que no solamente se trata de cuidar nuestras encías, sino que también el estado de nuestro cerebro podría estar en juego debido a una mala higiene dental.
Así, investigadores japoneses detrás de este estudio, publicado en la revista Neurology, afiliada a la Academia Americana de Neurología, han establecido una correlación entre las enfermedades de las encías y la pérdida de dientes con una disminución en el volumen del hipocampo, una región cerebral fundamental para la memoria y que tiende a deteriorarse en personas que padecen Alzheimer.
Perder dientes sería más beneficioso
Sorprendentemente, los resultados plantean la posibilidad de que, en determinados casos, podría ser más beneficioso perder dientes afectados por enfermedades que amenazan la salud de las encías, con el fin de proteger tanto la integridad de las encías como la del cerebro.
Aun así, los investigadores subrayan que el estudio no establece una conexión directa entre las enfermedades periodontales o la pérdida de dientes y el desarrollo del Alzheimer, sino que ha identificado una asociación entre ellos.
“Estos resultados ponen de relieve la importancia de preservar la salud de los dientes y no solo conservarlos”, afirma el dentista geriátrico Satoshi Yamaguchi, de la Universidad de Tohoku, en Sendai, Japón.
“La pérdida de dientes y la enfermedad de las encías, que es una inflamación del tejido que rodea los dientes que puede causar la contracción de las encías y el aflojamiento de los dientes, son muy comunes, por lo que la evaluación de un posible vínculo con la demencia es increíblemente importante”, agregó Yamaguchi.
De acuerdo con declaraciones de Yamaguchi a Newsweek, estudios anteriores han demostrado que la inflamación periférica crónica puede aumentar el riesgo de demencia y progresar la atrofia del hipocampo, es decir, lo que se traduce en un encogimiento del cerebro. Además, agrega el investigador, se ha planteado la posibilidad de que los microorganismos involucrados en las enfermedades periodontales puedan acceder al cerebro y dañar el tejido nervioso.
El estudio
El estudio se realizó en una región específica de Japón y contó con la participación de 172 individuos, con un promedio de edad de 67 años y sin problemas de memoria al inicio del estudio. Los participantes fueron sometidos a exámenes dentales, pruebas de memoria y escáneres cerebrales tanto al inicio del estudio como cuatro años después.
Los investigadores evaluaron el número de dientes de cada participante y la presencia de enfermedades de las encías mediante mediciones de la profundidad de sondaje periodontal.
Cambios en el hipocampo izquierdo del cerebro
En resumen, un menor número de dientes y una mayor enfermedad periodontal se asociaron con un encogimiento más rápido del hipocampo izquierdo. Esta relación se manifestó tanto en casos de enfermedad periodontal leve como grave, lo que sugiere que controlar y tratar estas afecciones podría tener un impacto positivo en la salud cerebral.
“Los hallazgos sugieren que conservar los dientes con enfermedad grave de las encías está asociado con la atrofia cerebral. Es crucial controlar la progresión de la enfermedad de las encías mediante visitas periódicas al dentista, y puede ser necesario extraer los dientes con enfermedad grave de las encías y sustituirlos por prótesis adecuadas”, aseguró Yamaguchi.
Editado por DW.