Tras 17 años de vigencia del voto de los ecuatorianos en el exterior, su participación no ha superado el 30 %, y con la implementación de la votación telemática se espera que este porcentaje vaya en aumento.
En el Ecuador, para los migrantes que viven en el extranjero el voto en los consulados se legalizó en el 2002. Pero según los registros oficiales, fue a partir del 2006 que estos ciudadanos se volvieron activos en cada proceso electoral ejerciendo el sufragio, siendo miembros de las juntas receptoras del voto o veedores.
Con la legislación actual, la Constitución del 2008, en el numeral 2 del artículo 62, estableció que el voto será facultativo (no obligatorio) para las personas de entre 16 y 18 años, las mayores de 65 años y los ecuatorianos que habitan en el exterior.
Estos últimos tienen derecho a elegir presidente y vicepresidente de la República, asambleístas nacionales y de la circunscripción del exterior, y podrán ser electos para cualquier cargo.
En el padrón electoral constan 13′450.047 ecuatorianos habilitados para votar. De ellos, 409.250 residen en el extranjero y están empadronados. Ellos representan apenas el 3,04 % del padrón.
Para promover su participación, las últimas reformas al Código de la Democracia incluyeron una disposición para que se hagan proyectos piloto de voto electrónico, telemático y por correspondencia.
Fue así como en las elecciones generales del 2021 en Otawa (Canadá) se aplicó el voto postal, con una participación del 56 %; el electrónico en Buenos Aires (Argentina), con un 36 %; y el telemático en Phoenix (Estados Unidos), que tuvo el 33 %.
Luego, para las recientes elecciones del 5 de febrero, el Consejo Nacional Electoral (CNE) aplicó el voto telemático en 52 zonas electorales, en las que se registraron 97.100 electores, de los que 6.665 se inscribieron para sufragar por los vocales del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) y el referéndum.
Mientras que para los comicios presidenciales y legislativos anticipados de este domingo, 20 de agosto, el Consejo Nacional Electoral resolvió que solo se hará la votación telemática para las tres circunscripciones: Europa, Asia y Oceanía; Estados Unidos y Canadá; y Latinoamérica, el Caribe y África, en donde hay 409.250 electores.
La decisión se tomó por lo improvisado del proceso, luego que el presidente de la República, Guillermo Lasso, diluyó el pleno de la Asamblea Nacional y, por tanto, se convocó a elecciones anticipadas.
El CNE argumentó las complejidades operativas y logísticas para enviar a esos países el material electoral y la contratación de espacios que sirvan como recintos para el voto presencial.
Para la ejecución de esta modalidad se contrató a la empresa pública de la Escuela Politécnica del Ejército, que se encargó de la planificación y desarrollo de los componentes tecnológicos, como el software, las seguridades y dar asistencia técnica.
De acuerdo con datos oficiales, hasta este viernes, 18 de agosto, se reporta la inscripción de 86.638 electores en las tres circunscripciones, que corresponde a un 21,17 %, detalló Xavier Vera, director de Procesos Electorales en el Exterior.
Las estadísticas refieren que diariamente han tenido un registro de entre 2.300 y 5.600 inscripciones.
Se aspira a que hasta el domingo, día de la elección, se alcancen las 10.000 inscripciones y cierren con una participación de 100.000 electores ecuatorianos adicionales.
El técnico electoral reconoce que las elecciones anticipadas han sido un proceso suigéneris por los cortos plazos, pero cree que han tenido una “buena acogida”, porque empezaron la inscripción para el voto telemático con 23.245 personas y se sumaron otras 63.393.
Según el director, los ecuatorianos que se inscriben para esta modalidad no tendrán que volver a hacerlo para futuros procesos electorales, pues quedan registrados en la base de datos del CNE.
El peso del voto del exterior a nivel histórico ha tenido niveles que van del 18 % y 19 % hasta un 23 %, según Vera, siendo las elecciones presidenciales las que llaman el interés de los migrantes.
La expectativa es aumentar el interés, y para las presidenciales del 2025 se podría incrementar en 70 zonas electorales esta modalidad.
La baja participación se atribuye a que el voto es facultativo, el clima y los gastos en pasajes en los países en donde residen que dificultan sus traslados.
“Hay ciudadanos que adquirieron la nacionalidad de otro país y pierden el interés en votar; otros votan porque quieren participar de las decisiones democráticas; y otros, porque necesitan el certificado para un trámite en el Ecuador, como la compra de bienes”, recalcó Vera.
Los datos públicos revelan que el ausentismo del migrante ecuatoriano ha sido alto en los últimos 17 años (2006-2021)
Para ejemplificar: en la circunscripción electoral de América Latina y el Caribe, el ausentismo en el 2006 fue del 27,7 %, y en el 2021, del 74,5 %.
En las elecciones del 2019, cuando se eligió a los siete vocales del CPCCS por primera vez por voto popular, el ausentismo fue del 76,5 %.
En la circunscripción de Estados Unidos y Canadá en el 2006 fue del 45,7 %, y al 2021, del 75,7 %. El más alto fue en los comicios del 2019, cuando este alcanzó el 86 %.
En Europa y Asia, el ausentismo en el 2006 fue del 38,7 %, y en el 2021, del 62,3 %. El más alto se observó en el 2007, con el 76,2 %.
En la elección presidencial del 2021, en la segunda vuelta electoral de abril, hubo una participación de las tres circunscripciones del exterior que alcanzó el 32,7 %; pero el ausentismo fue del 67,3 %.
El analista electoral Diego Tello opinó que el voto migrante es un porcentaje “pequeño y muy íntimo”, que se debe a circunstancias como las distancias que hacen que el elector recorra desde su domicilio hacia un recinto electoral que el CNE alquila.
“El peso electoral es poco frente a los 13 millones de ecuatorianos empadronados y los 10 millones que sí se acercarán a votar. Pero el voto telemático podría provocar que se incremente la participación, tomando en cuenta que, por ejemplo, en estas elecciones deben elegir a seis representantes a la Asamblea. Aunque, con la vigencia del método Webster, podrían llegar apenas dos asambleístas”, acotó Tello.
Los migrantes ecuatorianos que quieran votar deben inscribirse a través del portal web del CNE (cne.gob.ec), que estará activo hasta el último día de la elección.
Una de las últimas medidas que adoptó el consejo es que puedan sufragar desde cualquier lugar del mundo en el que se encuentren. Es decir, no requerirían estar en la circunscripción del exterior en la que residen para ejercer su derecho.
Magdalena Pullas, ecuatoriana, vive en Nueva Jersey (Estados Unidos) desde hace 23 años, y cree que los niveles de ausentismo de sus connacionales se deben a que el voto es facultativo y al “desinterés que han mostrado los Gobiernos de turno para los migrantes”.
Para estas elecciones, ella teme que la “transición” inesperada al voto telemático tenga problemas.
“Una vez que nos inscribimos, el CNE debe enviar un código, y nos da recelo de que no llegue el correo electrónico, tomando en cuenta que los ecuatorianos esperamos hasta el último momento para hacer las cosas, y qué nos garantiza que vamos a poder hacer uso de ese derecho de sufragar”.
Contó que, pese a que la mayoría de los migrantes cuenta con un teléfono inteligente, aún hay dificultades para el registro en el portal web del CNE.
Publicada en el Universo.