La calidad del aire en Quito se ve afectada por los incendios. En un primer momento, el 30 de agosto, se alertó a los ciudadanos del nororiente de la necesidad de usar mascarilla.
Sin embargo, luego del monitoreo constante de la Secretaría de Ambiente se actualizó la situación y se ha calificado el aire en Rango Óptimo. Quiere decir que no representa un riesgo para las personas y animales del sector en llamas.
Para las personas que viven cerca de las zonas donde aún hay llamas es recomendable cerrar las ventanas y puertas para evitar el ingreso de humo. Mientras que salir a la calle o hacer actividades al aire libre no está contraindicado.
🚨 ACTUALIZACIÓN 07:30 | Compartimos el estado actual de la calidad del aire en DMQ.
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Para cuidar la salud
Lo primero es no alarmarse. Si bien en los últimos dos días de agosto de 2023 se han registrado al menos 15 incendios en Quito, la situación no es motivo de riesgo para la salud.
De acuerdo con el doctor Esteban Ortíz, «es más perjudicial manejar moto en la congestión y en medio de nubes de esmog que respirar un poco de humo medio día». Esto se debe a que el aire gira y sigue llevándose las partículas y cenizas lejos del sitio afectado.
En medio de un flagelo el humo puede empezar a emanar dióxido de carbono (CO2), monóxido de carbono (CO), metano, óxidos de nitrógeno, amoníaco y partículas sólidas.
Ortiz añade que las personas con enfermedades respiratorias son las que deben protegerse más. Recomienda que usen una mascarilla R95 o KN95 que «realmente filtran el aire».
Mientras que las mascarillas quirúrgicas poco o nada ayudan a cuidar la salud. Aunque el galeno resalta que «nadie se va a enfermar de manera aguda por respirar medio día un poco de humo».
Para quienes padecen problemas como asma o alergias el humo puede desencadenar un broncoespasmo. Se trata de un estrechamiento de las vías respiratorias y no permiten el ingreso y salida del aire.
Ortíz también cuenta que pasó por el lugar de los incendios y no logró identificar una calidad de aire riesgosa a simple vista. Y destaca que los monitoreos se apliquen de manera constante hasta que se controle el fuego.
El doctor hace un llamado a la calma de la población y exhorta a que se apliquen estrategias e prevención. Por ahora solo queda esperar que los bomberos concluyan con los trabajos de control de las llamas y enfriamiento del lugar.