Pablo Escandón, docente de la Universidad Andina Simón Bolívar e integrante del Comité de Debates del Consejo Nacional Electoral (CNE), explicó la nueva dinámica que tendrá el debate presidencial de cara a las elecciones anticipadas en el Ecuador.
En el espacio de entrevistas del Noticiero 24 Horas Escandón dijo que son en total 40 preguntas que abarcan cinco ejes: política, seguridad, economía, social y medio ambiente y que cada cuestionamiento proviene de estudiantes, colectivos, agremiaciones y ciudadanía en general.
“Nosotros como miembros del Comité hemos visto que las preguntas no sean académicas ni populares, es decir que lleguen a un equilibrio. El objetivo es que al término del debate los ecuatorianos podamos comprender y tengamos la capacidad de discernimiento sobre las ideas de cada candidato”, agregó Escandón.
En este sentido, explicó que principalmente se espera que cada candidato tenga una preparación para el debate y no llegue con discursos políticos. “Queremos que el candidato responda sobre lo que conoce sobre el país. No queremos que se imaginen preguntas sino que vengan dispuestos a contestar de manera espontánea sobre lo que saben. Que no existan argumentos pre elaborados, ni que se esperen preguntas de cajón”, dijo el docente.
De igual manera, Escandón expuso que la idea principal es conocer la perspectiva del candidato, atendiendo al tiempo que tendrá el nuevo Gobierno para trabajar, sin dejar de lado aquellas cuestiones que tienen que ver con lo estructural del Estado.
Asimismo, comentó que el objetivo del CNE y del Comité de Debates es que se genere un voto informado y por ello han visto la necesidad de cambiar la estructura del programa para evitar bloques extensos y preguntas repetidas.
“En muchos casos los propios moderadores o candidatos no llegaban a recordar o se perdía mucho tiempo en volver a hacer la pregunta. Ahora hemos visto la necesidad de que exista debate con ciertas preguntas para ciertos candidatos. Luego cambiará a otra pregunta totalmente diferente y que esté dirigida a otros candidatos”, manifestó Escandón.
Dinámica del debate
La normativa aprueba un máximo de 3 horas de programa, pero el Comité de Debates llegó a la conclusión que este tiempo es excesivo y por ello se prepara un formato completamente distinto. A criterio de Escandón se busca que los candidatos tengan respuestas completamente directas y puntuales, que no se vayan por las ramas ni se conviertan en un discurso de tarima.
“Queremos que los candidatos respondan la interrogante de forma concisa. Hemos pedido al CNE que el moderador tenga la capacidad de encausar al candidato. De ser necesario, pida que responda la pregunta sin utilizar un guion predeterminado”, comentó el catedrático.
También se refirió a aquella ronda de preguntas que se realizan entre los candidatos, asegurando que el moderador tendrá la capacidad de interrumpir en el momento que se registren agresiones o insultos.
“Lo que menos queremos es que existan esas características que se dieron en las elecciones seccionales, donde se preguntaban cosas que no tienen nada que ver. Esto, para empeorar la imagen del oponente o quitar puntos en las encuestas”, explicó el docente.