La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) alertó por una un fenómeno que puede terminar con la vida en la Tierra. Se trata de la explosión de las estrellas supernovas, las cuales pueden llegar a irradiar ondas electromagnéticas mortales y alcanzar a objetos y planetas ubicados a más de 160 millones de años luz, por lo que podría repercutirnos.
En la investigación realizada por la NASA, Ian Brunton, investigador de la Universidad de Illinois y coautor del estudio explicó que “si un torrente de rayos X barre un planeta cercano, la radiación alteraría severamente la química atmosférica de la Tierra.
Según Brunton, este proceso “podría acabar con una parte significativa del ozono, que en última instancia protege la vida de la peligrosa radiación ultravioleta de su estrella anfitriona”.
La NASA tiene de cerca a las supernovas
La NASA observa las emisiones de 31 supernovas y sus posibles efectos en el resto del universo, a través de los equipos del Observatorio de rayos x Chandra, de las misiones Swift y NuStar y XMM-Newton que pertenece a la Agencia Espacial Europea (ESA).
Según explican los científicos, el principal problema en la explosión de una supernova es la emisión de los rayos x, una radiación que impactaría directamente en la corteza de la Tierra, que provocaría consecuencias irreversibles a corto plazo para mantener la vida.
La extinción de todas las especies no sería inmediata, sino que primero sufriría la biología de la corteza terrestre, que afecta a millones de especies necesarias para mantener la cadena alimenticia.
Luego, los organismos del ecosistema marino estarían afectados por el dióxido de nitrógeno provocado por los rayos X. Más tarde, los rayos ultravioleta extinguirían todas las plantas de la Tierra.
Por último, una neblina tóxica marrón oscura asfixiaría a los humanos y a todo tipo de vida que haya sobrevivido hasta el momento.
¿Qué son las estrellas supernova?
El sitio oficial de la NASA explica que una supernova es la explosión de una estrella que es extremadamente brillantes y llenas de energía.
La causa de uno de los tipos de supernova es una estrella masiva moribunda, que alcanzó al menos cinco veces la masa de nuestro Sol y luego explota.
Estas estrellas masivas queman enormes cantidades de combustible nuclear en sus núcleos, o centros, lo que producen toneladas de energía. El calor genera presión, y la presión creada por la incineración nuclear de la estrella también evita que la estrella se derrumbe.
Tal como explica la NASA, las estrellas mantienen el equilibrio entre dos fuerzas opuestas, la gravedad de la estrella intenta compactar la estrella, para que sea la bola más pequeña y densa posible.
Sin embargo, el combustible nuclear que se quema en el centro de la estrella genera una fuerte presión hacia el exterior. Este empuje hacia afuera crea resistencia ante la compresión hacia adentro de la gravedad.
Cuando una estrella masiva se queda sin combustible, se enfría, y esto hace que la presión caiga. La gravedad gana, y la estrella, de repente, se desmorona.
Por lo general, queda atrás un núcleo muy denso, así como una nube expansiva de gas caliente llamada nebulosa. La supernova de una estrella que tiene más de 10 veces el tamaño de nuestro Sol puede dejar atrás los objetos más densos del universo: los agujeros negros .