La Corte Constitucional está actualmente revisando el proceso de juicio político contra el Presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, y decidirá próximamente si el proceso es admisible o no. La posible destitución del Presidente ha sido objeto de debate en el país y algunos líderes políticos y civiles han sugerido que Lasso debería considerar la opción de la muerte cruzada.
En el programa Políticamente Correcto del domingo 26 de marzo transmitido por Ecuavisa, la titular de la Corporación Participación Ciudadana, Ruth Hidalgo, y el exasambleísta César Rohon, expresaron su opinión de que la única forma de solucionar la crisis política en Ecuador sería mediante la muerte cruzada. Según Hidalgo, Lasso debería haber declarado la muerte cruzada al inicio de su gobierno, después de la vacunación contra el Covid-19.
Rohon respaldó esta idea y afirmó que incluso si la Corte Constitucional rechaza el juicio político, la Asamblea Nacional seguirá buscando destituir al Presidente. El asambleísta Salvador Quishpe, también presente en el programa, mostró una posición poco clara sobre los efectos políticos de la muerte cruzada, aunque reconoció que podría generar protestas sociales lideradas por el movimiento indígena y tener efectos inesperados.
La muerte cruzada es un mecanismo constitucional que permite a las autoridades disolver la Asamblea Nacional y convocar a nuevas elecciones.
¿Qué es un dictamen ficto y qué efectos tiene en el juicio político?
Ruth Hidalgo asegura que un escenario posible dentro de la Corte Constitucional frente al pedido de juicio político se conoce como ‘dictamen ficto’. Es decir, que si no se llega a un acuerdo entre los jueces de la Corte para admitir o inadminitir el proceso, el proceso quedaría en nada y la Asamblea podría entender esa posición como “silencio administrativo”.
“Si esto sucede, la solicitud volvería a la Asamblea Nacional para que se resuelva qué hacer con el trámite”, concluyó Hidalgo.
Alí Lozada, presidente de la Corte Constitucional, aseguró en declaraciones a la prensa que la decisión que se tome estará sujeta a las leyes ecuatorianas, como muestra de independencia de poderes.
Frente a toda es realidad y ante un “país desmadrado”, César Rohon insiste en que el Gobierno no debe esperar más tiempo para cerrar la Asamblea.
¿La Asamblea puede declararse en resistencia?
Si Guillermo Lasso decide disolver la Asamblea, mediante el mecanismo constitucional llamado muerte cruzada, Ruth Hidalgo dice que no le extrañaría que los legisladores busquen declararse en resistencia o buscar una acción de protección con algún juez. “El constante abuso de garantías constitucionales podría ser usado por los asambleístas para invalidar la muerte cruzada”.
El asambleísta Quishpe aclaró que él no se declararía en resistencia, pero sí aseguró que continuaría la lucha en las calles. “Y no es protestar por un puesto, es por las necesidades de todos los ecuatorianos”.
Un gobierno civil militar ante el descontrol social
Para el exasambleísta Rohon, si la crisis política en Ecuador no se ve solucionada con la muerte cruzada, por la insistencia de los grupos sociales en tomarse las calles, “las Fuerzas Armadas podrían intervenir en la instauración de un nuevo gobierno civil-militar”. Un escenario que Ecuador no ha visto desde hace varias décadas.
“Los militares tienen que poner orden y seguramente elegirían un ciudadano como presidente hasta que se convoquen a nuevas elecciones”, concluyó Rohon.
El presidente Lasso está a la espera de que la jueza Teresa Nuques, designada como ponente en la revisión constitiucional del pedido de juicio político, convoque a los jueces para deliberar. La posición de la Corte se conocería hasta el jueves 30 de marzo.