La nueva variante de COVID-19, Ómicron, llamada así por la OMS, ha creado varias interrogantes en el planeta. ¿Qué tan preocupante puede ser esta nueva mutación del coronavirus?
Paúl Cárdenas, Ph.D. en Medicina Genómica e investigador del Instituto de Microbiología de la Universidad San Francisco de Quito (USFQ), quien también ha trabajado de cerca en la secuenciación del genoma del virus y sus variantes en Ecuador responde las varias dudas.
A continuación 10 datos claves para comprender lo que sucede con la nueva variante:
- El virus (Covid-19) naturalmente va cambiando. Existen mutaciones que facilitan su transmisión. Lo que sabemos es que si la persona tuvo Covid-19 es baja la posibilidad de recontagiarse, sin embargo, ómicron es una variante nueva con mutaciones que pueden escapar al sistema inmune, por ende hay riesgo aumentado de reinfección.
- Que existan varias mutaciones no es sinónimo de que el virus sea más peligroso. Puede llegar un momento en el que el virus tenga tantas mutaciones que ya no le sea fácil proliferar en las células de una persona.
- La variante ha ocasionado síntomas leves, pero hay que considerar que la población en África (lugar donde se originó la variante) es joven. Las personas que desarrollan síntomas más graves son las poblaciones con más edad. Por ahora no se sabe qué tan fuerte puede ser esta variante.
- Lo que preocupa con ómicron en Sudáfrica es lo siguiente; cuando llegó Beta fue la variante predominante, pero con la llegada de Delta fue la que tomó fuerza y se impuso a Beta. Ahora ómicron es la que puede imponerse a Delta lo que demuestra que es una variante importante.
- Un problema es que las vacunas han llegado a los países desarrollados en un número alto. África solo tiene un 6% de vacunación. Haití, por ejemplo, tiene menos del 5% de población inmunizada. Estos sitios facilitan la proliferación de nuevas variantes.
- ¿Qué se puede esperar de ómicron las próximas semanas? El inconveniente es que en diciembre se dan muchos viajes por las fiestas. Personas viajando e infectándose son un riesgo alto para que se trasmita y se movilice el virus. Si esto llega a países con bajos niveles de vacunación puede ocasionar rebrotes. El invierno, en el hemisferio norte, puede ser uno de los factores que ayude a la propagación.
- Se debe considerar fuertemente ponerse la tercera dosis y mantener las medidas de bioseguridad. Prevenir hacer reuniones en lugares cerrados y cambiarlos por sitios abiertos. Mantenerse resguardado si se tiene síntomas.
- La USFQ, a través del Instituto de Microbiología, ha secuenciado las muestras de diferentes hospitales, públicos y privados, para conocer qué variantes circulan en el país. Esa vigilancia, más el proceso de vacunación ha logrado controlar a Delta.
- Nuevamente, existe la incertidumbre de sí se puede considerar al Covid-19 una enfermedad endémica. Y, endémico no significa que ya no sea grave, significa que se mantenga el número de casos en una cantidad esperable y que aún existan ciertos brotes, pero no para considerarlos olas de contagio.
- Ya no debemos pensar en la inmunidad de rebaño. Con Delta se necesitaba que más del 90% de la población esté vacunada para lograr la inmunidad de rebaño. Con ómicron quizás no lleguemos a la inmunidad de rebaño y hay que tomarlo en cuenta.