El ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín, presentó a los nuevos comandantes generales de las tres ramas de las Fuerzas Armadas y aseguró que con la reorganización se busca una optimización de la capacidad de los órganos operativos y calicó las teorías conspirativas como ridiculeces, pues es un cambio normal.
El viernes 4 de diciembre, con los decretos ejecutivos 1198, 1199 y 1299, el Presidente Lenín Moreno cambió a los comandantes de las Fuerzas Amadas: Naval, Terrestre y Aérea. En el caso de los jefes de la Aviación y Marina cumplieron los dos años en el cargo, como determina la ley. Sin embargo, para el comandante de la Fuerza Terrestre, ese tiempo se cumplía en octubre del 2021. Estas modificaciones implican cambios en toda la jerarquía militar del Ecuador.
“La función del ministro de Defensa es el asesoramiento y la recomendación al presidente de la República para la reorganización del Comando Conjunto, por qué la reorganización, porque si cumplieron con su tiempo de servicio en los dos casos, hay necesidad de que el Comando Conjunto tenga un nuevo equipo”, dijo Jarrín.
El Presidente designó a Moreno designó al contraalmirante Rafael Poveda Romero como el nuevo comandante general de la Fuerza Naval; al brigadier general Gustavo Agama Pérez como comandante de la Fuerza Aérea Ecuatoriana, y el general de Brigada Washington Buñay Guevara como comandante de la Fuerza Terrestre.
Luis Lara, es el nuevo jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.