Los profesionales debemos tener la capacidad de transformarnos. Adaptarse y reaprender son las claves a tener presentes y que nos llevarán a mantenernos en el mercado laboral a través del tiempo.
Desde hace algunos años se conoce a través de estadísticas de varias consultoras de Recursos Humanos que 3 de cada 4 vacantes no se hacen visibles, y se cubren con headhunting, base de datos y referidos, por lo que añadiendo el factor de la pandemia para la nueva búsqueda de empleo “in situ y post covid -19” es nuestra obligación pasar de ser sujetos pasivos a activos, es decir convertir la adversidad en oportunidad.
Dado que los factores externos siempre han estado allí, depende de cada uno de nosotros gestionar nuestra búsqueda laboral, para lo cual comparto algunas acciones para la empleabilidad:
- Marca Personal y profesional en redes 2.0.
Es imprescindible crear relaciones profesionales a través de las redes sociales y esto se logra manteniendo una presencia online a través de la marca personal y profesional, esta se convertirá en el sello que nos diferenciará o no de la competencia.
Recordemos cuidar nuestra imagen no sólo en las redes sociales laborales sino también en las redes sociales personales ya que con una buena reputación se pueden multiplicar las oportunidades y nunca se sabe cuándo pueda surgir una laboral y/o personal.
- Reconocer dónde y cómo buscar trabajo
Si bien es cierto, la pandemia trajo consigo la caída de muchas industrias, hay otras que han crecido y se han potencializado, e incluso hay nuevos sectores que han surgido.
La OIT ha identificado los sectores que no peligran por la pandemia como:
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- El sector de las actividades sanitarias y de servicios sociales.
- El sector de servicios de limpieza.
- Los servicios públicos esenciales.
- La producción de alimentos(agricultura, ganadería, silvicultura y pesca).
- El sector de la tecnología.
Identificar qué industrias han surgido, resurgido o se han mantenido es clave para empezar la búsqueda laboral.
2.1. Exponer un plan de trabajo de buscar trabajo:
Dentro de este punto, es importante destacar que actividades como: Plantearse objetivos, planificar horarios y ponerse tareas diarias, son esenciales para conseguir más oportunidades laborales.
- Potenciar la Hoja de Vida
En la actualidad hay innumerables formatos agradables a la vista y muchos son bastante buenos, sin embargo si su contenido no es de impacto y contiene la información adecuada y relevante para el reclutador o la persona que está publicando la vacante, no servirá de mucho.
Así mismo la hoja de vida se debe incluir a través de las redes 2.0 o portales que lo permiten, el número uno en la actualidad es Linkedln.
- Incrementar las competencias digitales
El mundo cambió de forma inesperada, la pandemia ha obligado a que se agilite el uso de herramientas digitales, por lo cual se debe buscar cómo optimizar las habilidades laborales en la actualidad, incluso las competencias digitales, que desde el año 2014 Roca Salvatella, consultora española, las incorporó dentro de las competencias:
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- Conocimiento digital
- Comunicación en entornos digitales
- Trabajo en red
- Gestión de la información digital
- Impactar en las entrevistas
En múltiples ocasiones la persona escogida para una vacante no es la que conoce más o tiene más experiencia, dado que aunque existen individuos que tienen una capacidad cognitiva impresionante, muchos conocimientos y hasta expertis, no saben venderse profesionalmente en las entrevistas. Convencer e impactar sin perder la propia esencia, es clave para generar una entrevista ganadora.
- Capacitarse constantemente y seguir evolucionando de forma profesional y personal.
Esta sin duda es la clave para avanzar y estar listos cuando se pueda presentar alguna oportunidad. Justamente gracias a la tecnología podemos encontrar un sin número de capacitaciones e incluso gratuitas en diversos sectores laborales. Aquí lo que debemos entender es cómo poder identificar el expertis y conocimientos de la persona que está brindando esa capacitación, pues nos estaremos nutriendo también de los mismos.
Teniendo en claro estos puntos, recordemos que ninguna organización va a contratarnos porque “tenemos familia y necesidades”, las organizaciones nos contratarán porque somos capaces de satisfacer una carencia y les entregamos una ventaja competitiva respecto a otros posibles candidatos.
Incluso seremos nosotros como colaboradores los que podamos poner en conjunto con la organización las reglas del juego, pues seremos considerados elementos necesarios y parte de la estructura medular de la empresa para la que colaboremos.