A través de la cuenta de Twitter de la Casa Blanca, la administración Trump anunció que firmó una orden ejecutiva para que autoridades federales puedan castigar a plataformas como Google, Facebook y Twitter, luego de que esta última red social calificó de ‘engañosos’ algunos de los tuits del mandatario y desató una polémica alrededor de la información que da el presidente a través de su cuenta.
Trump anunció un decreto para limitar la protección de las redes sociales y la laxitud de la que gozan para la publicación de contenido. “¡Este será un gran día para las redes sociales y la IMPARCIALIDAD!”, tuiteó el mandatario, sin más detalles sobre el decreto en preparación, que debería ser el punto de partida de una larga batalla legal.
Twitter enlazó este martes por primera vez un mensaje de Trump con información verificada que contradecía lo que el presidente había publicado, un procedimiento habitual en la red social pero que hasta ahora se había resistido a aplicar al mandatario. Según el Washington Post, Trump planea abordar la famosa Sección 230 de la Ley de Decencia en las Comunicaciones, la “Communications Decency Act”.
Esta norma ofrece inmunidad a Facebook, Twitter, YouTube o Google contra cualquier acción legal relacionada con el contenido publicado por terceros y les da la libertad de intervenir en las plataformas como lo deseen. El decreto tendría como objetivo modificar el alcance de esta ley y permitiría a las autoridades reguladoras decidir sobre las políticas de moderación de contenido.
“En un país que siempre ha apreciado la libertad de expresión, no podemos permitir que un número limitado de plataformas en línea filtre el debate al que los estadounidenses pueden acceder y participar en internet”, señala una versión preliminar del decreto obtenida por el Washington Post.
El debate sobre el sacrosanto estatuto de alojamiento de las plataformas en internet ha estado presente durante meses y va mucho más allá de la disputa entre Trump y Twitter. La Ley de Decencia en las Comunicaciones se ha mantenido prácticamente sin cambios desde que se aprobó en 1996, con la excepción de una enmienda que entró en vigencia en 2018 que levantó la inmunidad para los servicios que “promueven y facilitan la prostitución”.
Trump ha denunciado desde hace mucho tiempo lo que considera un sesgo ideológico y político por parte de los gigantes de Silicon Valley. “Los republicanos sienten que las plataformas de redes sociales censuran completamente las voces conservadoras”, dijo el miércoles. “Las regularemos severamente, o los cerraremos, para evitar que eso suceda”, señaló.
Twitter, frecuentemente acusado de ser negligente en el tratamiento de los comentarios hechos por gobernantes, publicó por primera vez el martes dos mensajes de Trump, agregando la mención: “Verifique los datos”.
Eran dos tuits en los que el presidente afirmaba que la votación por correo era necesariamente “fraudulenta” porque estaba sujeta a manipulación. La cuestión es particularmente delicada en medio de un año electoral alterado por la pandemia del coronavirus, que plantea dudas sobre cómo se organizarán los comicios presidenciales estadounidenses del 3 de noviembre.Timothy Klausutis.